El equipo La Natividad se llevó el tercer título en el Argentino Abierto de Polo tras superar a La Dolfina, destacando la actuación de Bartolomé Castagnola y Camilo Castagnola.
El espectáculo en el Argentino Abierto de Polo alcanzó su culminación en la cancha de Palermo, donde el verde de las tribunas se fusionaba con el cerezo del césped.
Antes de que Poroto Cambiaso entrara en acción en el arco rival, ya se sentía la fiesta en el ambiente. La Natividad celebró su tercer título en este prestigioso torneo con un resonante triunfo de 13 a 11 sobre La Dolfina. Los jugadores, como los hermanos Castagnola y sus compañeros Facundo Pieres y Pablo Mac Donough, se lanzaron al propio festejo, llenando el campo con alegría y abrazos, inyectando energía a su celebración.
El partido, aunque pareció tener un rumbo diferente en el primer tiempo, terminó con La Natividad alzando el trofeo. Después de caer por tres goles en el segundo chukker, el equipo se recompuso y, a partir del cuarto chukker, mostró un juego superior al del rival, construyendo una sólida victoria.
La transformación del encuentro se produjo en los últimos dos chukkers, donde levantaron un espectacular parcial de 7-0 que dejó sin respuesta a La Dolfina.
La clave fue un cambio en su estrategia; mejoraron el taqueo y comenzaron a jugar largo, colaborando todos en el campo.
Bartolomé Castagnola, quien había tenido un comienzo complicado bajo el dominio del equipo contrario, logró destacar y crecer en el juego, al igual que Pieres y Mac Donough, este último convirtiéndose en un jugador fundamental en el ataque y consiguiendo importantes goles.
Camilo Castagnola, el menor de los hermanos, se mostró implacable en su desempeño, ganando throw ins y marcando tanto de penal como en jugadas en movimiento.
Por el lado de La Dolfina, la historia fue decepcionante. A pesar de tener un comienzo sólido, la falta de efectividad en el arco fue evidente, logrando solo siete aciertos de 23 intentos. La presionante actuación de Adolfo Cambiaso no fue suficiente para mantener la ventaja inicial, y el cierre del encuentro fue trágico para su equipo, que tuvo que enfrentar una derrota amargada, especialmente tras el esfuerzo en vano de conseguir cuatro goles en la etapa final, que solo sirvieron para decorar el resultado.
En medio del fervor, con la presencia del presidente Javier Milei en las gradas, la historia del Palermo 2024 se cerró con un nuevo capítulo de gloria para La Natividad.
Es oportuno recordar que, bajo la dirección de su fundador Bartolomé Castagnola, el equipo había tenido una ascendente carrera en los últimos años, especialmente tras consagrarse campeón en 2021 y 2022, donde la competencia era feroz y los desafíos incesantes.
El futuro plantea interrogantes sobre la continuidad de algunos jugadores en La Dolfina y posibles cambios en La Natividad, aunque hasta el momento no se han confirmado oficialmente las separaciones o nuevas uniones.
Sin embargo, el ambiente de competencia sigue siendo intenso, y la llegada de nuevas formaciones es un rumor constante en el círculo del polo.
A medida que el trofeo regrese a Cañuelas, donde descansará al menos un año, el eco de la celebración resonará en las mentes de los jugadores y aficionados.
La Natividad ha demostrado una vez más que, a pesar de las adversidades, puede levantarse y brillar en las competiciones más importantes del mundo. El camino hacia el próximo año ya empieza a vislumbrarse y la euforia por lo logrado apenas comienza.