El astro argentino se mostró molesto tras la derrota de su equipo en la MLS, criticando decisiones arbitrales y resaltando la necesidad de unidad en momentos difíciles.

La melancolía y el fastidio se hicieron evidentes en el rostro de Lionel Messi tras la reciente derrota de su equipo, Inter Miami, en la Major League Soccer (MLS).

Los dirigidos por Javier Mascherano cayeron 3-0 en su estadio ante Orlando City, en un partido marcado por la mala suerte y decisiones arbitrales controvertidas.

Con esta derrota, Inter Miami suma cinco partidos perdidos en los últimos siete encuentros, evidenciando una profunda crisis deportiva que preocupa a la afición y a la institución.

Las dificultades del equipo se acentúan en un período clave de la temporada, justo antes de enfrentarse al Mundial de Clubes, una competición que siempre ha sido importante para clubes y jugadores que buscan prestigio internacional.

Messi, capitán y figura emblemática del equipo, no ocultó su molestia tras el encuentro: "Hicimos una buena primera parte, presionando y controlando el balón, pero todo se vino abajo por una jugada puntual.

El árbitro señaló que desconocía la regla en una situación clave, lo cual influyó en el resultado. La jugada del primer gol fue polémica; Gallese (el arquero de Orlando City) recibió un pase y, en lugar de jugar con las manos, la tomó con las manos, y luego asistió a Muriel para el gol.

Son errores que afectan y cambian los partidos".

Además, Messi criticó duramente el desempeño arbitral en varias ocasiones recientes. En el partido contra San José Earthquakes, comentó que quedó molesto por una infracción en el área en tiempo de descuento que el árbitro no pitó, situación que terminó en su expulsión momentánea.

"No puedo entender cómo en esas jugadas no se ven las faltas claras. La MLS debería revisar con más atención el trabajo de sus árbitros, porque estas decisiones marcan la diferencia en los resultados", afirmó.

Estas declaraciones no son aisladas. La historia de Messi en Estados Unidos también ha estado marcada por quejas similares en partidos pasados. La gestión del arbitraje en la MLS ha sido motivo de debate en los medios y en las redes sociales, dado que decisiones polémicas parecen afectar la calidad del espectáculo y el rendimiento del equipo argentino-camposino.

Por otra parte, el rendimiento de Inter Miami ha sido motivo de preocupación en la tabla de la Conferencia Este, donde ocupa una posición cada vez más relegada.

La situación deportiva también ha generado dudas sobre la posible continuidad de Messi en el club, aunque él aún no ha dado respuestas claras sobre su renovación.

Históricamente, la presencia de figuras de calibre mundial como Messi en la MLS ha ayudado a elevar el perfil del fútbol en Estados Unidos. No obstante, para consolidar su crecimiento, es fundamental que la organización del torneo mejore los controles y decisiones de los árbitros, ya que decisiones erróneas pueden perjudicar no solo a los equipos sino también la imagen general de la liga.

Mientras tanto, Messi sigue concentrado para afrontar los próximos partidos y buscar revertir la mala racha de su equipo. La esperanza está puesta en que la unión del plantel y una mejor actuación arbitral puedan cambiar el rumbo de la temporada. Sin embargo, el astro argentino dejó en claro que en momentos difíciles, la unión y la constancia son clave para salir adelante, y que aún confía en las capacidades del grupo para sacar adelante la situación.