En un evento memorable, el boxeador argentino Mirco Cuello deslumbró al público en el T-Mobile Arena de Las Vegas.

En una pelea repleta de intensidad y emoción, Cuello logró revertir una situación adversa para conseguir un espectacular nocaut técnico sobre el mexicano Christian Olivo Barreda en el último round.

Esta victoria no solo mantiene su récord de invicto, que ahora se eleva a 15-0, sino que lo catapulta a una oportunidad de combatir por el título mundial de pesos pluma de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) contra el actual campeón, el británico Nick Ball.

Mirco Cuello, nacido hace 24 años en Arroyo Seco, se presentó como un fuerte competidor desde el inicio de la pelea.

Sin embargo, se encontró en un aprieto tras ser derribado en el segundo asalto.

A pesar de la caída, mantuvo la fe en su capacidad para dar vuelta el combate, una mentalidad que demostró en el último round.

"Sabía que venía perdiendo, me dijeron en el quinto o sexto round cómo venían las cosas", declaró Cuello después de la pelea.

En el inicio del décimo asalto, las tarjetas mostraban un panorama sombrío: 88-82, 87-83 y 86-84 a favor de Olivo.

Consciente de que el tiempo se agotaba y solo tenía una opción, Cuello se lanzó al ataque y logró conectar una combinación devastadora que culminó con un potente gancho al cuerpo.

El árbitro detuvo la pelea al ver que Olivo no podía continuar, decretando nocaut técnico en favor del argentino, una decisión que desató la euforia en el público presente.

Esta impresionante actuación de Cuello se produce justo 10 meses después de su último combate, donde había vencido al sólido boxeador ugandés Sulaiman Segawa.

La expectativa ahora crece a su alrededor, ya que se prepara para enfrentar al campeón Nick Ball, quien ha mostrado un desempeño formidable en la categoría.

Mirco Cuello ha tenido una carrera amateur destacada, destacándose en eventos como los Juegos Olímpicos de la Juventud de Buenos Aires 2018, donde obtuvo la medalla de bronce en su categoría, y el Mundial de Boxeo de Ekaterimburgo en 2019. En los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, luchó hasta los octavos de final en la categoría pluma.

Antes de su explosiva victoria en la última pelea, Cuello estaba consciente de las dudas sobre su capacidad para retornar a la cima del boxeo profesional.

Su récord de 15 victorias en 15 combates, 11 de ellas por nocaut, establece a este joven como una de las grandes promesas del boxeo argentino.

En esta travesía, ha peleado en distintos países, incluyendo Estados Unidos, Colombia, Uruguay, México y Panamá, lo que le ha otorgado una valiosa experiencia internacional.

Al terminar el combate, Cuello expresó: "Ahora a prepararse mejor que nunca", dejando claro su compromiso de estar en óptimas condiciones para el encuentro que se avecina con Ball.

La oportunidad está al alcance, y la comunidad del boxeo argentino aguarda con ansias cómo se desarrollará esta futura pelea por el título mundial.