La región de Castilla y León acoge durante tres días las catas de la prestigiosa competición vinícola Zarcillo, con un jurado de 80 expertos de 20 países. México es el país invitado y los premios se entregarán en Segovia en junio, destacando la calidad y el patrimonio vitivinícola de la zona.

Desde el martes 25 de mayo, la ciudad de Ávila se convierte en el epicentro internacional del mundo del vino al acoger la vigésima edición de los 'Zarcillo International Wine Awards'.

Durante tres jornadas, en el centro de congresos Lienzo Norte, un jurado compuesto por 80 expertos catadores de 20 países diferentes evaluará, en catas a ciegas, una amplia variedad de vinos procedentes de distintas regiones del mundo.

Este evento, organizado por la Junta de Castilla y León a través de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, se ha consolidado como uno de los certámenes vitivinícolas más prestigiosos a nivel global, contando con el respaldo de la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV) y la Federación Mundial de Grandes Concursos (VINOFED).

La tradición de los Premios Zarcillo, creada en 1991, ha crecido en reconocimiento y relevancia internacional, posicionándose como un referente en la evaluación de la calidad del vino.

En esta edición, los expertos valorarán los vinos en condiciones controladas, con botellas codificadas, temperaturas precisas y fichas de cata normalizadas según los criterios de la OIV y la Unión Internacional de Enólogos.

Cada mesa de jurado, integrada por cinco profesionales del sector — enólogos, sumilleres, críticos y Masters of Wine, entre otros —, realizará evaluaciones individuales en completo anonimato, garantizando máxima objetividad.

Los vinos que superen los 93 puntos en la escala de evaluación accederán a una cata final programada para el jueves por la tarde, donde se decidirán los galardones con el Gran Zarcillo de Oro en juego.

La ceremonia de entrega de premios tendrá lugar en Segovia el 16 de junio, seguida de un cóctel en el Jardín de los Zuloaga, y contará con la entrega de los Premios Zarcillo de Honor a trayectorias ejemplares en la promoción del vino, la conservación del patrimonio vitivinícola y el impulso al desarrollo rural.

La edición de este año, además, concede un especial protagonismo a México, país invitado, que presentará sus vinos en actividades paralelas, incluyendo catas dirigidas y visitas culturales.

La diversidad del jurado, con 37 de sus miembros titulados como Masters of Wine, refleja la pluralidad y el nivel de profesionalismo que caracteriza a esta competición.

La región de Castilla y León, conocida por su tradición vinícola, cuenta con más de 750 bodegas y 84.000 hectáreas de viñedo, generando más de 33.000 empleos y representando el 32,6% del valor económico de los vinos con denominación de origen en España. La importancia del sector en la economía regional es significativa, ya que contribuye al desarrollo rural y al mantenimiento de la cultura enológica.

La celebración de estos premios refuerza la posición internacional de Castilla y León como uno de los principales centros productores de vino de calidad en Europa.

Además de las catas y las entregas de premios, los asistentes podrán disfrutar de actividades complementarias como catas dirigidas a vinos de la Denominación de Origen Protegida Cebreros y de México, así como visitas culturales y cenas maridadas con vinos de las 16 figuras de calidad de Castilla y León.

La comunidad busca no solo premiar la excelencia enológica, sino también promover el conocimiento y la difusión del patrimonio vinícola regional, que tiene raíces que se remontan a la Edad Media, cuando Castilla fue uno de los principales centros de producción vitivinícola en Europa.

La historia del vino en Castilla y León se remonta al menos al siglo IX, y hoy en día es un símbolo de identidad y tradición. La entrega de premios en Segovia, con su impresionante acueducto romano y su patrimonio cultural, simboliza la unión entre la historia y la modernidad en el mundo del vino.

Con esta vigésima edición, los Zarcillo consolidan su compromiso con la excelencia y la innovación en el sector, promoviendo una visión global que respeta las raíces y tradiciones de Castilla y León mientras fomenta nuevos horizontes en la enología internacional.