La Junta de Castilla y León ha presentado un requerimiento al Ministerio de Transportes para que no retire su compromiso de conectar Ávila con la A-6 mediante autovía, ante la licitación de estudios que priorizan mejoras en la N-403.

Durante un acto celebrado en la ciudad de Ávila, el consejero de Movilidad y Transformación Digital de Castilla y León anunció que la Junta ha presentado un requerimiento previo al Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible con el objetivo de que reconsidere su decisión de no continuar con la construcción de una autovía que conecte Ávila con la A-6 en dirección a Madrid.

Esta medida ha generado preocupación en la provincia, que sufre un importante déficit en infraestructura de transporte y comunicaciones.

Supuestamente, el Gobierno central ha licitado recientemente un estudio para mejorar la carretera N-403, lo que implica que no se convertirá en una vía de alta capacidad, como inicialmente se había proyectado.

La Junta, por su parte, señala que esta decisión supone un retroceso para el desarrollo socioeconómico de la región, ya que la conexión por autovía sería fundamental para facilitar el movimiento de personas y mercancías, además de potenciar el turismo y la inversión en la zona.

El consejero José Luis Sanz Merino afirmó que la decisión del Ejecutivo central de cerrar el expediente sin ofrecer alternativas viables deja a Ávila en una situación de desigualdad respecto a otras provincias de Castilla y León y del resto de España.

Según supuestamente fuentes cercanas al Ministerio, la licitación del estudio de la N-403 forma parte de un plan para mejorar la infraestructura vial en la región, aunque desde la Junta se considera que esta medida no es suficiente para cubrir las necesidades de la provincia.

Supuestamente, la Junta ha solicitado además una prórroga de dos años en los plazos de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) para la futura autovía, con el fin de que no caduque y se puedan mantener los avances realizados en los proyectos.

Esta petición se fundamenta en que el Plan de Infraestructuras Estatal 2012-2024 señalaba a la A-40 como un corredor estratégico clave para conectar Ávila con el resto de Castilla y León y con el norte de España.

La autovía, de doble carril, facilitaría el acceso y la movilidad, además de impulsar el desarrollo económico y social de la región.

Supuestamente, también se han planteado alternativas como la ampliación del corredor ferroviario Ávila-Madrid, que podría incluir la mejora de servicios y la modernización de las estaciones, en un esfuerzo por descongestionar las carreteras y ofrecer una opción de transporte más sostenible.

El consejero lamentó que el nuevo mapa de transporte supuestamente dejaría sin servicio de autobús a 86 pueblos de la provincia, afectando a muchas comunidades rurales.

La posición de la Junta ha sido respaldada por diferentes instituciones, incluyendo las Cortes de Castilla y León, el Congreso de los Diputados y el Senado, donde se han presentado diferentes iniciativas para defender la necesidad de una infraestructura que vertebre el territorio y cree oportunidades para todos.

Según Sanz Merino, la Junta no va a dejar de reclamar lo que considera justo para Ávila, y continuará exigiendo un compromiso real por parte del Gobierno central para conectar esta provincia mediante una autovía que permita su desarrollo integral.

Supuestamente, esta lucha forma parte de un largo historial de reivindicaciones en la región, que han sido apoyadas por sucesivos gobiernos autonómicos y locales.

La autovía Ávila-Madrid, que lleva décadas en el programa de infraestructuras, es vista como uno de los proyectos prioritarios para mejorar la calidad de vida de los habitantes y potenciar el crecimiento económico en un territorio que, según datos históricos, ha sido tradicionalmente menos favorecido en cuanto a inversiones en transporte comparado con otras provincias de la comunidad.

En conclusión, la Junta de Castilla y León continúa presionando al Gobierno para que reconsidere su postura y garantice la ejecución de una infraestructura vital para el desarrollo de Ávila y su entorno, en un contexto donde supuestamente el avance en infraestructuras es clave para reducir las desigualdades territoriales y promover un crecimiento equilibrado.