La Junta de Castilla y León refuerza su compromiso con la inclusión social y la creación de empleo en el tercer sector, destacando los beneficios de los programas de apoyo dirigidos a personas con discapacidad en entidades como ASPAYM Castilla y León.
La Junta de Castilla y León continúa promoviendo activamente la integración laboral y social de las personas con discapacidad a través de diversos programas de apoyo dirigidos a entidades del tercer sector.
En una reciente visita a la sede de la Fundación ASPAYM Castilla y León en Valladolid, la consejera de Industria, Comercio y Empleo, Leticia García, resaltó los efectos positivos que estas iniciativas tienen tanto en la comunidad como en la economía regional.
Desde hace varias décadas, la Fundación ASPAYM Castilla y León ha sido un referente en la atención a personas con discapacidad en la comunidad, contando actualmente con más de 2.850 socios y cerca de 300 empleados. La organización ofrece múltiples servicios que van desde la salud y la rehabilitación, hasta programas de empleo, autonomía personal, ocio accesible, residencias y centros de día.
Todo ello con el objetivo de mejorar la calidad de vida de sus usuarios y promover su participación activa en la sociedad.
Uno de los ejemplos más destacados de la colaboración entre la Junta y las entidades sociales es el programa financiado con aproximadamente 144.000 euros, que ha permitido la contratación de 12 personas desempleadas, de las cuales seis tienen discapacidad. Este apoyo económico, proveniente del Servicio Público de Empleo de Castilla y León, ha facilitado la incorporación de profesionales en áreas clave de la fundación, fortaleciendo sus servicios y facilitando la atención a quienes más lo necesitan.
Este programa forma parte de una estrategia más amplia de la Junta, que ha destinado en total más de 6,9 millones de euros para la contratación de más de 1.000 personas con discapacidad en diferentes municipios de la región. La inversión ha permitido la creación de numerosos puestos de trabajo en entidades sin ánimo de lucro, muchas de ellas dedicadas a la atención social y a la asistencia a personas con discapacidad.
En concreto, en la edición actual, se han contratado 415 empleados en toda Castilla y León, consolidando aproximadamente la mitad de estos empleos en el sector social.
Además, ASPAYM Castilla y León ha logrado mantener estables las plazas creadas en anteriores convocatorias, logrando que alrededor del 50 % de los trabajadores contratados en estas ediciones permanezcan en sus puestos tras la finalización de los programas, asegurando así una estabilidad laboral que beneficia tanto a las personas como a las instituciones.
El impacto de estos programas va más allá del aspecto económico, ya que fomentan la inclusión social y la igualdad de oportunidades. La consejera García destacó que estas iniciativas contribuyen a reducir las barreras que enfrentan las personas con discapacidad en el acceso al mercado laboral, promoviendo la autonomía y la participación activa en la vida comunitaria.
La colaboración entre la administración pública y las organizaciones del tercer sector ha sido clave para alcanzar estos logros.
Históricamente, Castilla y León ha sido pionera en implementar políticas de empleo inclusivas, que han evolucionado desde programas básicos hasta estrategias integrales que involucran formación, orientación laboral y apoyo personalizado.
La experiencia acumulada en estas décadas ha permitido perfeccionar los mecanismos de selección y seguimiento de los empleados, generando un impacto positivo en la calidad de vida de los beneficiarios.
El compromiso del gobierno regional y las entidades sociales se refleja en la continua ampliación de estos programas, con un especial énfasis en el fortalecimiento interno de las organizaciones y en la profesionalización de sus equipos.
La inversión en estos proyectos, que en euros equivale a aproximadamente 7,7 millones de euros, demuestra la voluntad de Castilla y León de consolidar un modelo de empleo inclusivo que sirva de ejemplo para otras comunidades.
En definitiva, los programas de apoyo al empleo en el tercer sector no solo benefician a las personas con discapacidad, sino que también aportan valor económico y social a toda la región, promoviendo una sociedad más justa, igualitaria y activa.
La labor de entidades como ASPAYM Castilla y León, junto con el respaldo de la administración, continúa siendo fundamental para alcanzar una Castilla y León más inclusiva y próspera.