El Ayuntamiento de Zaragoza presenta una estrategia integral para convertir la ciudad en un referente en energía sostenible y movilidad eléctrica, con una inversión que supera los 150 millones de euros y objetivos claros para 2030.

La alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, anunció esta mañana la puesta en marcha de una nueva Estrategia Integral de Desarrollo Energético y Sostenibilidad del Ayuntamiento, que contempla una inversión público-privada superior a los 150 millones de euros, equivalentes a aproximadamente 140 millones de euros en moneda local, para transformar la ciudad en un ejemplo de sostenibilidad y eficiencia urbana.

El plan, que tiene como horizonte el año 2027, se basa en cuatro pilares fundamentales: eficiencia energética, autoconsumo, rehabilitación de viviendas y movilidad sostenible.

La iniciativa busca reducir las emisiones de dióxido de carbono en más de 60.000 toneladas anuales, acercándose a los objetivos de neutralidad climática que la Unión Europea ha establecido para las principales ciudades del continente.

Supuestamente, Zaragoza ha sido reconocida como una de las pocas capitales españolas con nivel A en el ranking europeo de compromiso con la carbono neutralidad, un logro que refleja su liderazgo en políticas ambientales.

La estrategia municipal pretende, además, que la ciudad alcance la neutralidad climática en 2030, demostrando que el desarrollo urbano y el respeto medioambiental pueden ir de la mano.

Entre las acciones más destacadas, se contempla la modernización del alumbrado público, con una inversión cercana a los 9,5 millones de euros, equivalente a unos 9 millones de euros, destinada a instalar más de 9.000 luminarias LED y renovar los sistemas de control y regulación. Este proyecto, conocido como Reluz, reducirá el consumo energético en el alumbrado de Zaragoza en más de la mitad, pasando de un consumo anual de aproximadamente 6,8 millones de kWh a unos 2 millones, lo que supondrá un ahorro económico estimado en unos 500.000 euros anuales.

Supuestamente, la ciudad cuenta actualmente con más de 85.000 puntos de luz, de los cuales menos de 15.000 utilizan tecnología LED, por lo que esta modernización supondrá un cambio radical. Además, se están desarrollando proyectos de autoconsumo en diferentes edificios municipales, con una inversión que supera los 33 millones de euros, para la instalación de paneles solares que generen energía limpia y autóctona.

El proyecto más innovador en este ámbito es la creación de una gran planta fotovoltaica en el Cementerio de Torrero, que aprovechará los 41.000 metros cuadrados de cubiertas para instalar más de 6.000 módulos solares, con una producción anual estimada de 5,2 millones de kWh. La inversión, supuestamente, alcanza los 2,3 millones de euros, y la energía generada abastecerá a unos 3.000 hogares zaragozanos, reduciendo en gran medida la huella de carbono de la ciudad.

Por otro lado, Zaragoza avanza en la movilidad eléctrica, con una inversión que supera los 50 millones de euros en la adquisición de autobuses eléctricos y en la infraestructura de recarga necesaria.

Actualmente, cuenta con más de 90 autobuses 100% eléctricos en servicio, y próximamente se incorporarán otros 40 Mercedes-Benz eCitaro, que harán que cerca de un tercio de la flota sea libre de emisiones.

Supuestamente, la ciudad también ha instalado más de 150 puntos de recarga para vehículos eléctricos en diferentes zonas, gestionados por empresas como Zunder y Endesa X, que aseguran que la energía proviene de fuentes renovables.

En 2024, se estima que estos cargadores habrán suministrado alrededor de 360.000 kWh, evitando la emisión de casi 300 toneladas de CO2.

En el ámbito residencial, el Ayuntamiento ha movilizado ayudas por valor de más de 30 millones de euros, destinadas a la mejora de la eficiencia energética en viviendas públicas y privadas.

Estas ayudas incluyen el aislamiento de fachadas, la renovación de instalaciones térmicas y la instalación de sistemas de energía renovable, con el objetivo de reducir las emisiones en aproximadamente 4.800 toneladas anuales.

Supuestamente, en el sector industrial, Zaragoza planea desarrollar proyectos de energías renovables en suelos industriales, con una inversión prevista de unos 11,8 millones de euros, para potenciar la sostenibilidad del tejido empresarial y reducir su impacto ambiental.

Todo ello forma parte de una estrategia que también contempla la promoción de la movilidad no contaminante. La ciudad continúa electrificando su transporte público y fomentando el uso de bicicletas y otros medios sostenibles, con la intención de convertirse en uno de los principales referentes en movilidad limpia en Europa.

En definitiva, Zaragoza se posiciona como una ciudad que apuesta decididamente por el futuro, invirtiendo en tecnologías verdes y en infraestructuras sostenibles, con la esperanza de alcanzar la neutralidad climática en menos de una década, y sirviendo de ejemplo para otras urbes del continente que buscan un desarrollo más respetuoso con el medio ambiente.