Se presenta el proyecto 'Sevilla Oculta', una colaboración entre el Ayuntamiento, la Archidiócesis y la Fundación Cámara de Comercio para revitalizar el patrimonio conventual de la ciudad.
En Sevilla, el alcalde José Luis Sanz ha dado inicio a un significativo proyecto conocido como ‘Sevilla Oculta’, en colaboración con la Archidiócesis de Sevilla y la Fundación Cámara de Comercio.
Esta iniciativa se erige como un intento audaz por preservar y modernizar el patrimonio conventual de la ciudad, un legado cultural de incalculable valor que necesita ser integrado en el contexto urbano contemporáneo.
El objetivo de este ambicioso proyecto abarca la conservación, promoción y adaptación de conventos y monasterios que han sido parte integral de la historia y cultura sevillana.
A lo largo de los siglos, especialmente durante el apogeo económico y artístico del siglo XVI y XVII, Sevilla se convirtió en un centro de fundación de conventos, siendo uno de los lugares con mayor riqueza en patrimonio conventual a nivel mundial.
Esta riqueza no solo forma parte de la herencia histórica de la ciudad, sino que también es esencial para su identidad cultural y social. Las acciones públicas, junto con el sector privado, buscan asegurar que estos espacios no sean solo vestigios del pasado, sino que cobren vida y relevancia en el presente.
El alcalde Sanz subrayó que ‘Sevilla Oculta’ se concibe con una estructura de colaboración que asegurará la sostenibilidad del proyecto. Se establecerán tres órganos principales para guiar esta iniciativa: el Comité Institucional, el Comité Técnico y un Consejo Asesor. El primero será presidido por el Arzobispo de Sevilla y contará con la participación de importantes entidades locales, configurando así un marco sólido para el desarrollo de actuaciones estratégicas.
El Comité Técnico se encargará del diseño de un programa de acción y una investigación académica profunda, con el apoyo financiero de la Fundación Cámara de Comercio, que asumirá los gastos de implementación.
Entre las metas del proyecto se encuentran la promoción y difusión del patrimonio conventual, así como su modernización para que pueda ser un motor de desarrollo económico y generación de empleo.
La idea es crear un entorno que mantenga la funcionalidad religiosa y cultural de estos espacios, al tiempo que se aprovechen sus recursos para iniciativas económicas complementarias, como talleres de artesanía o gastronomía.
La historia de estos conventos se ve marcada por cambios drásticos, desde la desamortización de Mendizábal hasta la Revolución de 1868 que transformó el plano urbano de Sevilla.
La conservación de estos lugares es vital, no solo para la preservación del arte sacro que encierran, sino también para el legado espiritual que ofrecen a la sociedad sevillana.
Se estima que la superficie total construida de estos activos patrimoniales asciende a 78 000 m², representando un 1,8 % del total del área urbana de Sevilla, una proporción significativa que evidencia la importancia de estos conventos.
La iniciativa ‘Sevilla Oculta’ no solo busca preservar el pasado, sino también convertirlo en una oportunidad de futuro, donde el patrimonio religioso se integre plenamente en la vida urbana, se proteja y se potencie como un símbolo de identidad, cultura y desarrollo económico que beneficie tanto a las generaciones actuales como a las futuras.
La colaboración de todos los sectores de la sociedad es clave para que Sevilla continúe siendo un emblema del patrimonio histórico y religioso, al mismo tiempo que se posiciona como un referente en la protección y valorización de su legado.