La Diputación de Málaga lanza un proyecto innovador para apoyar a personas con daño cerebral adquirido en municipios pequeños.
La Diputación de Málaga ha dado un paso significativo en la mejora de la calidad de vida de las personas con Daño Cerebral Adquirido (DCA) mediante una colaboración con la Asociación de Daño Cerebral Adquirido de Málaga (ADACEMA).
Este proyecto, cuyo presupuesto asciende a 20,000 euros (aproximadamente 22,000 dólares), tiene como objetivo ofrecer talleres innovadores que fomenten la autonomía de las personas afectadas por DCA en diversas áreas, tales como el lenguaje, la comunicación, la memoria, el equilibrio y las funciones motoras.
La presentación del proyecto tuvo lugar en un evento donde Francisco José Martín, diputado de Centros Asistenciales, enfatizó la importancia de las entidades del tercer sector en la sociedad.
Destacó que la Diputación está comprometida con iniciativas que tengan un impacto positivo en la vida de los malagueños, especialmente en aquellos que enfrentan desafíos significativos en su vida diaria.
El DCA se define como cualquier lesión que afecta a las estructuras cerebrales debido a un accidente o enfermedad. Las causas más comunes incluyen traumatismos craneoencefálicos y accidentes cerebrovasculares, aunque otras condiciones también pueden dar lugar a DCA.
Esta afección puede cambiar drásticamente la vida de una persona, llevándola a depender de otros para su cuidado y gestión diaria. Según estudios, el DCA es una de las principales causas de discapacidad crónica en las sociedades modernas.
Las secuelas del DCA son variadas e incluyen trastornos motores que pueden resultar en una falta de movilidad, problemas sensoriales que afectan la vista o el oído, así como trastornos cognitivos que interfieren con la atención y la memoria.
Además, estas personas pueden experimentar trastornos emocionales como ansiedad y depresión, y enfrentar desafíos en sus relaciones laborales y sociales.
ADACEMA fue fundada en 2005 por un grupo de familiares de personas afectadas por DCA, y actualmente forma parte de la Federación Nacional de Daño Cerebral (FEDACE) y de la Federación Andaluza de Daño Cerebral (FANDACE).
El nuevo proyecto que se implementará se centrará en las comunidades de Álora y Pizarra, dirigidos especialmente a personas mayores y con discapacidad.
Estas poblaciones a menudo enfrentan barreras para acceder a recursos, en parte debido a la falta de familiaridad con las nuevas tecnologías.
Los talleres semanales que se llevarán a cabo serán impartidos por un equipo interdisciplinario de profesionales, incluyendo neuropsicólogos, terapeutas ocupacionales y logopedas.
La inclusión de nuevas tecnologías en la formación no solo busca mejorar la autonomía de los participantes, sino también potenciar sus oportunidades laborales en un mundo cada vez más digitalizado.
El acceso a estos talleres está abierto a todos los residentes de municipios menores de 20,000 habitantes, permitiendo que tanto personas con DCA como sus familiares y voluntarios se involucren.
La iniciativa no solo busca ayudar a quienes padecen DCA, sino también crear un sentido de comunidad y apoyo entre todos los implicados.
Este tipo de iniciativas son cruciales para fomentar un entorno más inclusivo y comprensivo, donde las personas con DCA puedan encontrar recursos y apoyo adecuados para mejorar su calidad de vida.
A medida que la sociedad avanza, es vital que se continúen desarrollando y apoyando proyectos que respondan a las necesidades de grupos vulnerables.