València aprueba el mayor presupuesto de su historia para 2026 y refuerza servicios clave

València dio un paso definitivo en la definición de sus cuentas para 2026. El Pleno municipal aprobó, de forma definitiva, el Presupuesto Municipal para el ejercicio venidero, un volumen que, según el gobierno, representa el mayor montante de la historia de la ciudad.

Las cuentas municipales ascienden a 1.250 millones de euros, con un incremento del 3,3% respecto al año en curso. En el terreno consolidado, que integra a los organismos autónomos y a las empresas municipales, la cifra se sitúa en 1.415,3 millones de euros, lo que implica un crecimiento del 5,7% y unas transferencias entre entes que, según el equipo de gobierno, permiten sostener servicios y proyectos de mayor alcance.

La primera teniente de Alcaldía y responsable de Hacienda, María José Ferrer San Segundo, subrayó que este presupuesto está orientado a la reconstrucción económica tras la Dana y a mantener el pulso económico, social, cultural y de #seguridad de la ciudad.

En el detalle de partidas, se destina una cantidad de 134,38 millones de euros a servicios sociales y promoción social; 230,7 millones a seguridad, regulación del tráfico y emergencias; y 279,3 millones a vivienda, #urbanismo y bienestar ciudadano.

La aprobación contó con el respaldo de los dos grupos de gobierno, Popular y Vox, mientras que la representación de Compromís y PSPV-PSOE votó en contra.

Por su parte, Eva Coscollà, portavoz de Compromís, sostuvo que, presuntamente, el incremento del presupuesto aparece como un efecto de entradas procedentes de transferencias de otras administraciones y no de una gestión más eficiente del propio consistorio; añadió que, a su juicio, permanece infrafinanciación en servicios esenciales y se arriesga a costos económicos para la ciudad de decenas de millones.

El portavoz socialista, Borja Sanjuán, afirmó que este sería el primer presupuesto en años que reduce su cifra total y acusó al gobierno municipal de estar sujeto a intereses de determinados sectores económicos.

En su intervención, vinculó la posibilidad de implementar una tasa turística de 6 euros por noche con la obtención de ingresos, aunque indicó que esa medida no quedó integrada en el presupuesto definitivo.

Estas críticas, presuntamente, forman parte de un debate más amplio sobre la financiación de la ciudad y el papel del gobierno ante el marco fiscal y las obligaciones de inversión.

Y que la gestión actual ha permitido reforzar áreas como vivienda

Ante las críticas, Ferrer San Segundo defendió que la ejecución de las cuentas está en marcha y mostró comparativas con años anteriores: aseguró que ya se ha ejecutado una parte relevante del gasto previsto, y que la gestión actual ha permitido reforzar áreas como vivienda, limpieza, seguridad y acción social.

También destacó la continuidad de una política de reducción de deuda, afirmando que la deuda ha experimentado una reducción notable, con una caída de alrededor de dos tercios en el periodo reciente.

Asimismo, el equipo de gobierno insistió en que estos presupuestos son instrumentos para que los recursos lleguen a los barrios y pedanías, y para sostener inversiones en urbanismo, transporte y servicios básicos.

En el marco de la conversación, se recordó que la ciudad ha atravesado momentos complejos en los últimos años y que la estrategia presupuestaria apunta a una trayectoria de continuidad, inversión social y desarrollo urbano.

En el cierre, el gobierno municipal remarcó que el presupuesto para 2026 no es una cifra aislada, sino un sello de una gestión que busca trabajar con seriedad, ambición de ciudadanía y resultados para València, con un enfoque claro en la atención a las personas, la seguridad y la calidad de vida en toda la ciudad.

Supuestamente, este planteamiento podría marcar el inicio de una nueva etapa de inversiones estratégicas, siempre dentro de un marco de sostenibilidad y gobernanza responsable.