Desde el 3 hasta el 9 de marzo, así como en otras fechas programadas, la #Ertzaintza llevará a cabo una serie de campañas de control de velocidad.
Estas acciones, que también se desarrollarán del 7 al 13 de abril y del 26 al 30 de mayo, son parte de un conjunto de 32 operativos planeados para el año 2025.
La principal meta de estas campañas es la reducción de accidentes de #tráfico y la prevención de muertes y lesiones en las carreteras de Euskadi.
El cumplimiento de los límites de velocidad será objeto de una vigilancia más estricta, con el objetivo de abordar el problema de la siniestralidad vial.
Las acciones preventivas se focalizarán en tramos de la red viaria donde se ha observado un elevado número de infracciones de velocidad, así como en lugares específicos conocidos por su alta tasa de accidentes.
Estibaliz Olabarri, Directora de Tráfico del Gobierno Vasco, declaró que "nuestras campañas buscan concienciar a la población sobre las serias y a menudo irreversibles consecuencias del incumplimiento de los límites de velocidad".
La directora añadió que el respeto a estos límites y la adaptación de la velocidad a las condiciones de la carretera y del clima son esenciales para evitar accidentes.
Los datos del año 2024 revelaron que el 32% de las muertes en accidentes de tráfico en #Euskadi fueron atribuidas a la velocidad inadecuada como causa principal
Los datos del año 2024 revelaron que el 32% de las muertes en accidentes de tráfico en Euskadi fueron atribuidas a la velocidad inadecuada como causa principal.
Estas cifras evidencian la urgente necesidad de aumentar la atención hacia este tema, ya que la relación entre velocidad y la severidad de los accidentes es alarmante.
De acuerdo a estudios recientes, existe una correlación directa entre el aumento de la velocidad y la severidad de los accidentes de tráfico. A velocidades más elevadas, no solo se incrementa el número de accidentes, sino también su gravedad. Por ejemplo, un vehículo que circula a 120 km/h puede necesitar una distancia de frenado equivalente a más de un campo de fútbol para detenerse completamente.
Esta realidad subraya la importancia de adoptar prácticas de conducción más seguras y responsables.
La reacción de las autoridades es un intento fundamental no solo de concienciar a los conductores, sino también de activar un cambio en la conducta de circulación de los ciudadanos.
La propuesta es que esta vigilancia activa contribuya a generar un entorno más seguro para todos los usuarios de la vía.
Con campañas como estas, Euskadi se posiciona como un modelo en la implementación de estrategias de seguridad vial, buscando reducir el número de víctimas en sus carreteras y crear una cultura de respeto hacia las normas de conducción.