El Gobierno Vasco ha tomado una decisión importante para el desarrollo urbano de Pasai Antxo, al anunciar la licitación del proyecto para la demolición del viaducto del Topo.
Esta obra, que cuenta con un presupuesto de aproximadamente 140.000 euros (unos 154.000 dólares), busca eliminar una barrera física que ha limitado el desarrollo del centro del municipio. El plazo de ejecución de los trabajos está establecido en seis meses, lo que permitirá que los avances se realicen de manera ágil.
La consejera de Movilidad Sostenible, Susana García Chueca, ha subrayado la importancia de esta demolición, señalando que ha sido una prioridad tanto para ella como para su predecesor, Iñaki Arriola.
La consejera ha expresado su satisfacción porque este paso adelante contribuirá a una mejor integración del territorio y un uso más adecuado de los espacios urbanos.
"Es gratificante ver que estamos avanzando en el derribo del viaducto y en la transformación de los espacios que antes estaban ocupados por esta infraestructura".
El viaducto del Topo, que se extiende a lo largo de unos 350 metros y funciona como puente sobre el río Molinao, ha sido un elemento distintivo del paisaje de Pasai Antxo.
Sin embargo, con las obras que se están llevando a cabo, la terminal antigua y el propio viaducto quedarán obsoletos. Desde el año 2016, el tramo ferroviario entre Herrera y Altza ha estado en funcionamiento, y las obras del segmento Altza-Galtzaraborda han comenzado a mediados de 2021, que incluyen la construcción de una nueva estación subterránea en el centro de Pasaia.
Esta nueva infraestructura está programada para entrar en servicio en el próximo año, lo que eliminará la necesidad del actual viaducto.
El proyecto que ha sido licitado no solo se enfocará en la demolición, sino que también deberá realizar un estudio para determinar las mejores alternativas que permitan regenerar el espacio que actualmente ocupa el viaducto y la estación elevada.
Este estudio evaluará la mejor manera de integrar esos espacios en el entorno urbano y propondrá un nuevo plan de urbanización que beneficie a la comunidad.
No solo en #Euskadi sino en muchas ciudades del mundo
La eliminación de barreras físicas en el entorno urbano es una tendencia que ha ganado impulso en los últimos años, no solo en Euskadi sino en muchas ciudades del mundo.
Reducir estas limitaciones puede abrir nuevas oportunidades para el desarrollo urbano sostenible, fomentando la conectividad y la interacción social. Pasai Antxo, con su rica historia y su cultura vibrante, se beneficiará enormemente de esta transformación.
Además de la demolición del viaducto, el Gobierno Vasco también ha licitado, recientemente, un proyecto para cubrir las vías en Galtzaraborda, Errenteria, lo que permitirá minimizar el impacto visual y acústico del tren en la zona.
Este tipo de iniciativas son esenciales para crear un entorno más amigable para los residentes y mejorar la calidad de vida en la región.
