La retirada masiva de quesos rallados por posibles piezas de metal en supermercados estadounidenses
Un importante fabricante de quesos en Ohio ha iniciado una retirada voluntaria de varios lotes de quesos rallados distribuidos en múltiples estados de EE.UU., tras detectar la presencia de fragmentos metálicos que podrían causar lesiones. La medida afecta a productos vendidos en cadenas como Walmart, Target, Aldi y otras tiendas populares, y ha generado preocupación entre los consumidores que aún podrían tener estos productos en sus hogares.
Supuestamente, un conocido fabricante de quesos con sede en Ohio ha lanzado una retirada voluntaria de varios lotes de quesos rallados después de que se detectara la presencia de pequeñas piezas de metal en algunos de sus productos.
La alerta, que fue comunicada inicialmente el 3 de octubre y sigue vigente a finales de diciembre, fue clasificada por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) como una retirada de categoría II, lo que indica que el consumo de estos productos podría causar efectos adversos temporales o reversibles.
La compañía, presuntamente Great Lakes Cheese Co., notificó que todos los productos afectados ya han sido retirados de los estantes y que se han reemplazado por nuevos lotes, asegurando que los productos actualmente disponibles en los supermercados son seguros para el consumo.
Sin embargo, todavía podrían encontrarse en los hogares de los consumidores que adquirieron estos quesos en fechas recientes.
El retiro afecta a diferentes marcas y mezclas de quesos rallados vendidos en al menos 31 estados, incluyendo marcas propias de las cadenas comerciales como Good & Gather en Target, Great Value en Walmart, así como marcas de supermercados como Publix, Sprouts y Happy Farms.
La distribución de estos productos en varios estados sugiere que la presencia de metal no fue un incidente aislado, sino que posiblemente ocurrió en varias etapas de producción o en la cadena de suministro.
Las piezas metálicas, supuestamente pequeñas y de difícil detección visual, podrían causar lesiones si se ingieren, especialmente en niños o personas con sensibilidad dental.
La compañía recomienda a quienes tengan en sus hogares alguno de estos productos que los desechen o los devuelvan al establecimiento donde los compraron para obtener un reembolso.
Además, la FDA ha instado a los consumidores a revisar cuidadosamente las etiquetas y a estar atentos a cualquier señal de productos afectados.
Es importante recordar que las retiradas de productos alimenticios, aunque parecen ser un evento aislado, forman parte de un proceso regulatorio que busca proteger la salud pública.
Estas medidas, en algunos casos, se toman con base en informes de control de calidad o en quejas de consumidores, y presuntamente, en este caso, la detección de las piezas metálicas fue resultado de inspecciones rutinarias o denuncias.
Desde la historia de la seguridad alimentaria
Desde la historia de la seguridad alimentaria, estas retiradas no son nuevas. En 2010, por ejemplo, varias marcas de cereales y productos enlatados tuvieron que retirar millones de unidades por riesgo de listeria o fragmentos metálicos.
Aunque en la mayoría de los casos los productos afectados son retirados rápidamente y se informa a los consumidores, siempre existe la preocupación por la posible exposición a sustancias peligrosas.
En conclusión, si adquiriste quesos rallados en las cadenas mencionadas en los últimos meses, es recomendable que verifiques si tu producto está incluido en la lista de retirados y que, en caso afirmativo, no lo consumas.
La #seguridad alimentaria sigue siendo una prioridad para las autoridades y las empresas, pero la responsabilidad también recae en los consumidores para mantenerse informados y actuar con precaución ante este tipo de alertas.
