Mariano Peralta Bauer se afianza en Borneo Samarinda y describe el crecimiento del fútbol en Indonesia
Un reportaje sobre la adaptación de Mariano Peralta Bauer en la Liga 1 de Indonesia, su rendimiento goleador y su visión de la vida en Samarinda, con contexto sobre el desarrollo del fútbol local.
A orillas del río Mahakam y en la quietud de Samarinda, #Mariano Peralta Bauer dialoga con tranquilidad desde el otro extremo del teléfono.
Mientras en Argentina empieza a moverse el tráfico de la mañana, él ya transita la noche del otro lado del mundo, como delantero de 27 años que dejó #San Lorenzo para intentar suerte hace un año y medio, tras pasar por Unión de Santa Fe y un club uruguayo.
El jugador narra que la decisión vino como una apuesta: salir de la Argentina para recibir una propuesta que llegaba a su representante a través de un intermediario.
“No sabía nada del país ni de dónde quedaba Bali, pero acepté la propuesta y me vine. Todo el mundo habla de Bali y yo no tenía idea de su existencia”, relata. En Borneo Samarinda, equipo que lidera la #Liga 1 de Indonesia, ha ido descubriendo un #fútbol mucho más intenso de lo que esperaba.
Después de una primera temporada prometedora, Peralta Bauer explotó en 2025, acumulando 9 goles en 14 fechas. La Liga 1 agrupa a 18 equipos que disputan un campeonato largo, con dos vueltas (ida y vuelta) entre agosto y junio. “Para mí, este campeonato está por encima del fútbol uruguayo en cuanto al pelotón extranjero: hay muchos brasileños, portugueses, españoles, japoneses y colombianos.
Incluso Alexis Messidoro juega en esta liga, Nahuelpán estuvo la temporada pasada y otros que dieron brillo al fútbol regional”, comenta el atacante, que extraña a su hijo Joaquín, de 7 años.
El Mundial Sub-17 de 2023 dejó como herencia a #Indonesia estadios modernizados y una afición cada vez más exigente. “Hay canchas para 40 mil o 45 mil personas, y el último campeón tiene millones de seguidores en redes; la pasión se siente en cada visita a las ciudades grandes, donde los aficionados son muy fervorosos.
En las calles, la gente reconoce a los jugadores y, cuando voy a la cancha, soy uno más de la gente”, describe.
La vida diaria en Indonesia también sorprende por su diversidad cultural. “El país es claramente joven en su crecimiento futbolístico, pero hay un ambiente de convivencia entre distintas religiones. Antes y después de cada entrenamiento, el técnico suele indicar a un jugador para que haga un breve rezo, pero cada persona respeta su propia creencia.
En Ramadán, por ejemplo, hay parates y horarios que se ajustan a las tradiciones locales”, señala.
La experiencia también llega con contrastes: el tránsito puede ser caótico y la infraestructura, a veces, deja ver diferencias notables respecto a Europa.
“Aquí, el control de tránsito no es igual que en Argentina; las calles suelen ser estrechas y hay un alto porcentaje de motos. En algunas ciudades, la gente dirige el tráfico y, a veces, te piden una propina para mantener el orden. Aun así, el ritmo diario tiene su encanto”, relata.
La vida fuera del terreno de juego también muestra su cara de realidad: la brecha entre ricos y pobres es evidente. “En Samarinda hay una pobreza marcada, aunque también hay gente con recursos; muchos ganan un salario mínimo que ronda los 200 dólares, cosa que, convertida a euros, representa alrededor de 185 euros al mes.
Es un contraste que te golpea al momento de pensar en la economía y la vida cotidiana”, confiesa.
La alimentación fue otro desafío: al inicio, la preocupación por la comida se transformó en una oportunidad de explorar. Peralta Bauer now come con más regularidad pescado, y señala que, gracias a la cultura local, hay una variedad de carnes, frutas y platos picantes que, con el tiempo, se vuelven parte de su rutina.
“He conocido mercados con platos extraños y sabores intensos; a veces la experiencia es fuerte, pero también es enriquecedora”, dice, sonriente. La familia y la identidad vasculando sus límites, el jugador admite que extraña especialmente la distancia de su hijo, pero encuentra consuelo en la posibilidad de conectarse online y compartir momentos de ocio con amigos argentinos.
El delantero reconoce que la temporada está lejos de terminar y que ya recibe acercamientos para continuar en la liga indonesia
En cuanto a su futuro, el delantero reconoce que la temporada está lejos de terminar y que ya recibe acercamientos para continuar en la liga indonesia.
“Si me quedo en Indonesia, será para seguir compitiendo al máximo; si un retorno a Argentina se da, sería para jugar en Primera. En cualquier caso, quiero mantenerme en un nivel alto y cerca de mi familia”, afirma con optimismo.
Detroit de un fútbol que no para de crecer, Indonesia se ha convertido en un destino cada vez más habitual para jugadores de la región. Peralta Bauer, que debutó en San Lorenzo y vivió la experiencia de su cantera, observa desde Asia un proceso de maduración que, más allá de los goles, también se mide en la comprensión de culturas distintas, la adaptación a un país con una pasión desbordada por el deporte y un calendario que promete seguir creciendo en los próximos años.
Así, entre radiografías de una Liga 1 que mira al futuro y recuerdos de un club histórico como San Lorenzo, el delantero sigue escribiendo su historia lejos de casa, con la vista puesta en el próximo partido y en la posibilidad de que su experiencia inspire a otros jugadores que sueñan con hacer carrera en mercados emergentes.