El Ayuntamiento de Valencia y la CEV colaboran para desarrollar proyectos sostenibles en el marco de la Capitalidad Verde Europea 2024.
El 27 de mayo de 2024, en Valencia capital, se firmó un acuerdo entre la alcaldesa y la presidenta de CEV Valencia para adoptar medidas sostenibles con el objetivo de convertir la ciudad en un lugar más verde, resiliente, eficiente e innovador.
Este convenio busca lograr la mitigación y adaptación necesarias para enfrentar los desafíos ambientales actuales y futuros.
De esta manera, se buscan alternativas para compensar la emisión de 22.500 toneladas de CO2 a la atmósfera a través de proyectos con un enfoque sostenible.
La alcaldesa María José Catalá destacó que la sostenibilidad no está reñida con la economía, sino que van de la mano.
En el marco de este acuerdo, se han establecido dos grandes líneas de trabajo.
La primera se centra en ayudar a las empresas a medir, compensar y certificar su huella de carbono, mientras que la segunda busca promover inversiones en energías limpias y sostenibles para reducir la huella de carbono en la ciudad.
Además, se está evaluando la capacidad de la Albufera para absorber carbono y reducir emisiones, con el fin de ampliar los espacios de compensación de huella de carbono a incluir humedales como este y el entorno de la Huerta.
La declaración de la Capitalidad Verde como acontecimiento de excepcional interés público es una de las peticiones realizadas por la alcaldesa, con el fin de obtener apoyo y beneficios fiscales para las empresas colaboradoras.
Asimismo, se destaca el compromiso de la CEV Valencia en la protección del entorno y la sostenibilidad, colaborando con el Ayuntamiento para garantizar un legado duradero de esta capitalidad verde.
En este sentido, se resalta el papel fundamental de las empresas locales en la implementación de prácticas sostenibles, desde la reducción de emisiones hasta la inversión en energías renovables.
Esta colaboración entre la ciudad y las corporaciones no solo impulsa la sostenibilidad, sino que también fomenta una cultura de responsabilidad ambiental en el sector empresarial, convirtiéndose en un modelo a seguir en términos de gestión ambiental y crecimiento sostenible.