El Ayuntamiento de Valencia lanza una nueva edición de presupuestos participativos que permitirá a los vecinos decidir cómo invertir 16 millones de euros en los diferentes distritos de la ciudad, con novedades que buscan ampliar la participación y facilitar el proceso.

Imagen relacionada de valencia abre un proceso participativo para decidir en que gastar 16 millones de euros en sus barrios

El Ayuntamiento de #Valencia ha anunciado la apertura de un innovador proceso participativo que permitirá a sus residentes decidir en qué proyectos invertir un total de 16 millones de euros, destinados a mejorar y transformar los barrios de la ciudad.

Esta iniciativa, denominada ‘VLCParticipa’, busca fortalecer la participación ciudadana y ofrecer una vía más sencilla y accesible para que los vecinos puedan influir en las decisiones que afectan a su entorno.

Este proceso se pondrá en marcha el próximo martes, 29 de abril, y se desarrollará en cuatro fases que facilitarán la presentación, apoyo, validación y votación de las propuestas ciudadanas.

La finalidad del Ayuntamiento es que cada distrito reciba una asignación inicial de aproximadamente 1500 euros, equivalente a unos 160.000 euros en moneda local, y que estas cantidades se distribuyan de manera proporcional a la población y a otros criterios sociales, en especial la renta media de cada barrio.

Una de las principales novedades de esta edición es la introducción del voto en contra, una herramienta que permitirá a los ciudadanos expresar su rechazo a ciertas propuestas, además del tradicional voto a favor.

Esta medida busca detectar posibles resistencias sociales antes de la ejecución de los proyectos y enriquecer la democracia participativa, aportando más matices y transparencia al proceso.

El proceso, que podrá seguirse a través de la web vlcparticipa.valencia.es, ha sido rediseñado con un enfoque más sencillo, transparente e intuitivo, para facilitar el acceso y la participación de toda la ciudadanía, sin necesidad de registro previo.

Basta con introducir datos básicos como el empadronamiento y la edad para poder presentar ideas o apoyar otras propuestas. Además, se reforzarán las campañas informativas en barrios con menor participación en ediciones anteriores, tanto de forma digital como presencial, con el fin de alcanzar a un público más diverso.

El proceso está estructurado en cuatro fases: la primera, de recogida de propuestas, durará desde el 29 de abril hasta el 31 de mayo, durante la cual cualquier persona mayor de edad, colectivos o asociaciones podrán presentar sus ideas para mejorar sus barrios.

En esta fase, cada propuesta necesita al menos 100 apoyos para ser considerada. La segunda fase, de apoyos, tendrá lugar del 1 al 22 de junio, permitiendo que cada participante respalde hasta cinco proyectos. La tercera fase, de análisis técnico y económico, se realizará entre el 23 de junio y septiembre, donde los técnicos municipales valorarán la viabilidad de las propuestas más apoyadas, considerando aspectos como el coste, la normativa y la sostenibilidad.

Solo aquellas propuestas que superen los 200 apoyos en esta fase, y que sean viables, pasarán a la votación definitiva en la última fase, que comenzará en septiembre.

En esta etapa, toda la ciudad podrá votar por las propuestas finalistas, incluyendo la opción de votar en contra, un aspecto que refuerza la transparencia y permite detectar posibles rechazos sociales.

El alcalde de Valencia ha destacado que este proceso demuestra el compromiso del Ayuntamiento con una participación real y transformadora, en la que los vecinos tienen un papel protagonista.

En ediciones anteriores, se registraron alrededor de 259 proyectos, de los cuales solo quedan pendientes unos 100, muchos de los cuales ya están en marcha o en proceso de licitación.

El objetivo ahora es avanzar en la ejecución de las propuestas y garantizar que los recursos sean utilizados de forma eficiente y en línea con las necesidades reales de los barrios.

Con una inversión inicial de aproximadamente 4,5 millones de euros, el reparto presupuestario se ha diseñado teniendo en cuenta la población y la renta media de cada distrito, para asegurar una distribución equitativa y justa.

La intención del Ayuntamiento es que estos fondos sirvan para impulsar proyectos que mejoren la calidad de vida, fomenten la cohesión social y contribuyan a la transformación urbanística de Valencia.

En definitiva, esta iniciativa busca que la ciudadanía tenga un rol activo en la gestión de los recursos municipales, promoviendo una ciudad más participativa, inclusiva y democrática, donde todos puedan ser protagonistas de su propio entorno y contribuir a su desarrollo colectivo.

La promoción de campañas inclusivas y el apoyo técnico buscan además reducir las desigualdades en la participación y llegar a todos los barrios, transformando la manera en que Valencia construye su futuro junto a sus habitantes.