Inician proyectos de restauración en la emblemática Lonja de la Seda de Valencia para rehabilitar el muro del hastial que sufrió daños por fuertes vientos.
El 26 de noviembre de 2024, el concejal de Patrimonio, José Luis Moreno, ha anunciado el inicio de los trabajos de reparación del muro del hastial de la Lonja de la Seda en Valencia, un emblemático Bien de Interés Cultural y Patrimonio de la Humanidad.
Esta obra es necesaria tras los desprendimientos que afectaron al lucernario norte de la cubierta, el cual tiene la función vital de iluminar y ventilar las impresionantes bóvedas de estilo gótico que adornan este monumento.
Los daños fueron ocasionados por un fuerte temporal de viento que provocó la caída de elementos de piedra de alabastro y estructuras de soporte, como los tapajuntas y los perfiles de acero inoxidable que sostenían las placas.
En respuesta a esta situación, el concejal ha informado que se ha implementado una cobertura provisional para proteger la zona afectada, así como un riguroso programa de revisiones semanales.
La intervención tiene un presupuesto aproximado de 36.422,21 euros, que incluye el IVA, y se espera que las obras se completen en un periodo de dos meses.
La empresa encargada de llevar a cabo estas labores es EMR SL, especializada en trabajos de restauración en monumentos históricos.
Esta compañía ha estado involucrada en la rehabilitación de otras importantes estructuras en Valencia, como la Catedral de Valencia y la Iglesia de los Santos Juanes.
Las obras consistirán en la eliminación de las placas de alabastro dañadas, así como en el saneamiento y refuerzo de la estructura del muro mediante perfiles de acero inoxidable.
Se instalarán nuevas placas compuestas de alabastro y vidrio, incorporando un perfil decorativo de acero inoxidable que será menos visible desde la calle, ya que no se utilizarán andamios para su ejecución.
A lo largo de la historia, la Lonja de la Seda ha sido un símbolo de la riqueza y el comercio de Valencia durante la época medieval, y su arquitectura gótica ha sido fundamental para el patrimonio cultural de la ciudad.
Por lo tanto, la restauración de este muro es de gran relevancia no solo por su estado físico, sino también por su importancia cultural e histórica.
Las nuevas placas que se van a utilizar están diseñadas específicamente para resistir mejor el paso del tiempo.
Al incorporar vidrio en su composición, estas placas superan la fragilidad inherente del alabastro y son más resistentes a las roturas, permitiendo así una mayor durabilidad.
Durante el tiempo que se ha esperado para comenzar estos trabajos, el hastial ha sido cubierto con una lámina de plástico para prevenir cualquier daño adicional, lo cual demuestra el compromiso del Ayuntamiento de Valencia con la conservación de su patrimonio histórico.
Además, el concejal ha afirmado que las labores de restauración se llevarán a cabo con el máximo cuidado para preservar la integridad de este bien cultural.
En conclusión, esta intervención es un paso significativo hacia la conservación de uno de los edificios más emblemáticos de Valencia, asegurando que las futuras generaciones puedan seguir disfrutando de su esplendor arquitectónico y su rica historia.