El Ayuntamiento de Valencia licita la regeneración de las avenidas Pérez Galdós y Giorgeta, con un presupuesto de 32,8 millones de euros y enfocado en la sostenibilidad y accesibilidad.
El 19 de diciembre de 2024, la ciudad de Valencia dio un paso significativo hacia la transformación de sus infraestructuras urbanas con la licitación de las obras de regeneración de las avenidas Pérez Galdós y Giorgeta.
Este proyecto está diseñado para mejorar la calidad de vida de sus residentes y dotar a la zona de un entorno más seguro y agradable. La Junta de Gobierno Local está prevista para aprobar, en su próxima reunión, la contratación de las obras por un total de 32,8 millones de euros (aproximadamente 32.736.838 euros), financiados en parte por los fondos europeos Next Generation. La iniciativa es parte de la Estrategia del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Unión Europea.
El ambicioso proyecto, que fue aprobado por el Ayuntamiento de València el 4 de octubre de 2024, tiene como principales objetivos la mejora de la habitabilidad, la renaturalización del espacio urbano y la reducción de la contaminación.
Se busca aumentar el número de árboles en la zona, así como diseñar un entorno accesible para todos los ciudadanos. Ambos ejes de la ciudad, que suman 2,2 kilómetros desde el Paseo de la Petxina hasta Sant Vicent Màrtir, se transformarán para facilitar la movilidad sostenible, promoviendo el uso de transporte público, bicicletas y desplazamientos a pie.
Uno de los aspectos más destacados del proyecto es la integración de más áreas verdes y espacios públicos que fomenten un ambiente saludable y habitualmente atractivo.
La propuesta incluye la creación de un nuevo carril bici, que será segregado y bidireccional, lo que garantiza la seguridad de ciclistas y peatones. Este carril se colocará al nivel de la calzada y estará convenientemente separado por una franja arbolada que proporcionará sombra y comodidad a los usuarios.
El diseño del proyecto tuvo en cuenta una amplia evaluación de alternativas estructurales, y finalmente se decidió mantener el paso inferior que hay en la actualidad.
Se descartó una opción más costosa que implicaba la construcción de una estructura auxiliar por un monto de 19 millones de euros, ya que el costo y el tiempo que requeriría excedían considerablemente lo presupuestado por el Ayuntamiento.
En cuanto a la accesibilidad, el nuevo diseño también tiene previsto la mejora del pavimento de acera existente. Esto incluye la ampliación de alcorques para el plantado de árboles y la adecuación de los espacios a las normativas de accesibilidad vigentes. La mejora del mobiliario urbano accesible, junto con la incorporación de sistemas de drenaje sostenible, reitera el compromiso del Ayuntamiento con un proyecto que sea respetuoso con el medio ambiente y funcional para todos los usuarios.
La reforma de Pérez Galdós y Giorgeta no solo atiende a una necesidad actual de la zona, sino que se inscribe dentro de una tradición de intervención urbana que busca transformar Valencia en una ciudad más verde y habitable.
Este tipo de proyectos ha sido constante en la ciudad, que a lo largo de los años ha adaptado su infraestructura para hacer frente a los retos contemporáneos en sostenibilidad y habitabilidad.
Con estas nuevas obras, Valencia se posiciona como un referente de urbanismo sostenible en España.