Alumnos de primaria en Valencia se convierten en investigadores para promover un uso responsable del agua en sus centros educativos, mediante una iniciativa que combina análisis, propuestas creativas y sensibilización social.

El Ayuntamiento de Valencia ha puesto en marcha una novedosa iniciativa para fomentar un uso más responsable del agua en los centros educativos de la ciudad.
Bajo el nombre de 'Ecoauditoría del Agua', este proyecto busca involucrar a la comunidad escolar en la identificación y reducción del consumo hídrico en las instalaciones educativas.
La iniciativa, en colaboración con el grupo Global Omnium y Aguas de València, ha permitido que alumnos y alumnas de primaria se conviertan en verdaderos investigadores, explorando sus propios centros escolares para entender mejor cómo se consume el agua y qué medidas pueden implementarse para optimizar su uso.
Este proyecto forma parte de las acciones que el Ayuntamiento de Valencia ha promovido para cumplir con los objetivos de sostenibilidad establecidos en su plan ambiental, en línea con las metas del Acuerdo de París y los compromisos europeos para la conservación del recurso hídrico.
En concreto, Valencia ha establecido un plan estratégico para reducir en un 20% su consumo de agua en los próximos cinco años, en un esfuerzo por hacer frente a las sequías recurrentes y el cambio climático.
En la primera fase de 'Ecoauditoría del Agua', los estudiantes del CEIP Castellar-l’Oliveral, ubicado en la pedanía de Pobles del Sud, han llevado a cabo un exhaustivo análisis de las instalaciones del centro.
Acompañados por sus docentes, los alumnos han medido el uso de agua en diferentes áreas, como baños, fuentes, cocinas y zonas de riego. Además, han realizado encuestas y jornadas de sensibilización para involucrar a toda la comunidad educativa en la importancia de cuidar este recurso vital.
La participación activa de los niños y niñas ha permitido detectar puntos críticos y proponer soluciones concretas. Entre las ideas más innovadoras destacan la instalación de bridas en las fuentes para reducir el flujo de agua, la diferenciación de grifos según su uso, y la implementación de sistemas lúdicos en los aseos para fomentar una higiene más eficiente.
Todas estas propuestas buscan no solo reducir el gasto hídrico, sino también educar a los estudiantes sobre la importancia del ahorro y la protección del medio ambiente.
Los resultados preliminares del proyecto indican que, con estos cambios, el consumo de agua en el CEIP Castellar-l’Oliveral podría reducirse en al menos un 15%, lo que equivale a unos 30.000 litros al año, aproximadamente 25 euros en tarifa local, considerando que el coste del agua en Valencia ronda los 0,50 euros por metro cúbico. Estas cifras reflejan el impacto económico y ecológico de acciones sencillas pero efectivas.
Además de las mejoras en infraestructura, los alumnos han desarrollado campañas de sensibilización, incluyendo jornadas informativas, concursos de memes y creación de carteles para promover una cultura del ahorro en toda la comunidad escolar.
Estas actividades buscan que tanto profesores como alumnos adopten hábitos más sostenibles y actúen como agentes de cambio en su entorno.
Este proyecto no solo ha enriquecido las habilidades de investigación, análisis y trabajo en equipo de los estudiantes, sino que también ha generado un impacto real en la gestión del agua en los centros educativos.
Los centros participantes y sus alumnos han demostrado un compromiso firme con la sostenibilidad, sirviendo de ejemplo para otras comunidades escolares en Valencia y en toda España.
En un contexto global donde la escasez de agua se convierte en uno de los mayores desafíos ambientales, iniciativas como 'Ecoauditoría del Agua' representan un paso importante hacia un futuro más sostenible.
La educación y la participación activa de los jóvenes son clave para lograr cambios duraderos, y Valencia demuestra con este proyecto que el compromiso con el cuidado del agua puede comenzar en las aulas.