El Ayuntamiento de València ha aprobado la creación de un organismo autónomo que unificará las funciones de CEMAS y València Clima i Energia para potenciar las políticas medioambientales y energéticas de la ciudad de cara a 2030.
En un paso decisivo hacia la consolidación de políticas medioambientales en València, la Junta de Gobierno Local ha dado luz verde a los trámites para transformar dos fundaciones en un nuevo organismo autónomo municipal.
Esta medida busca optimizar recursos, reducir duplicidades y fortalecer la gestión en áreas clave como la sostenibilidad, la energía y la lucha contra el cambio climático.
Las fundaciones en cuestión son CEMAS (Centro Mundial para la Alimentación Urbana Sostenible) y València Clima i Energia. La primera, creada en septiembre de 2020, tiene como objetivo promover políticas agroalimentarias urbanas sostenibles y posicionar a la ciudad como referente internacional en este ámbito.
La segunda, fundada en 2010, se dedica a impulsar iniciativas medioambientales, energéticas y de sostenibilidad en el ámbito municipal. Sin embargo, ambas instituciones han presentado en el pasado cierta superposición de funciones y competencias, lo que dificultaba su gestión eficiente.
El concejal de Mejora Climática, Carlos Mundina, explicó que esta decisión responde a la necesidad de crear un organismo más potente que pueda afrontar los retos de València de cara a 2030, en línea con su condición de Ciudad Misión.
“Nuestro objetivo es que este nuevo ente sea un motor de acción en sostenibilidad, mitigación y adaptación al cambio climático, así como en la transición energética de la ciudad”, afirmó.
Desde que València se unió a la iniciativa de las Ciudades Misión, impulsada por la Unión Europea, el Ayuntamiento ha asumido un compromiso firme con la reducción de emisiones y el desarrollo de un modelo urbano más sostenible.
La creación de un organismo autónomo permitirá centralizar esfuerzos y recursos en estas áreas, facilitando la coordinación entre diferentes departamentos y entidades.
La Comunidad de Madrid presenta un decálogo de buenas prácticas para proteger el Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama
La Comunidad de Madrid ha presentado un decálogo de buenas prácticas para la protección y preservación del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama (PNSG), con el objetivo de garantizar un adecuado cuidado de este espacio natural. El PNSG celebra su décimo aniversario como lugar turístico, recibiendo alrededor de 2,5 millones de visitantes cada año. Se han establecido centros de atención y puntos de información en las áreas más concurridas.Históricamente, la Fundación València Clima i Energia ha sido un pilar en la promoción de políticas energéticas y medioambientales en la ciudad, trabajando en proyectos de eficiencia energética, energías renovables y sensibilización ciudadana.
Por su parte, CEMAS ha participado en iniciativas relacionadas con la alimentación urbana sostenible, fomentando prácticas agrícolas respetuosas con el medio ambiente y promoviendo el consumo local y saludable.
La transformación en un organismo autónomo no implicará la desaparición de sus actividades, sino su integración bajo una estructura más sólida y con mayor capacidad de acción.
La idea es que este nuevo ente pueda liderar de manera efectiva las políticas municipales en sostenibilidad, impulsar la transición energética y seguir posicionando a València como una ciudad comprometida con el medio ambiente y la lucha contra el cambio climático.
Este paso también responde a un contexto global en el que las ciudades juegan un papel fundamental en la mitigación del cambio climático. Desde la firma del Acuerdo de París en 2015, muchas urbes han intensificado sus esfuerzos para reducir su huella de carbono y promover estilos de vida sostenibles.
València, en particular, ha establecido metas ambiciosas para 2030, incluyendo la reducción del 40% de sus emisiones de gases de efecto invernadero y un incremento en el uso de energías renovables en su matriz energética.
En definitiva, la creación de este nuevo organismo autónomo representa un avance estratégico para València en su camino hacia un futuro más sostenible y resiliente.
La ciudad continúa demostrando su compromiso con la Agenda 2030 de las Naciones Unidas, aspirando a convertirse en un referente en innovación ecológica y gestión responsable del medio ambiente.
