La ciudad se adhiere a la declaración de la FEMP, enfatizando la necesidad de políticas de igualdad efectivas.

València ha decidido unirse a la declaración institucional de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) en conmemoración del Día Internacional de las Mujeres, un gesto que resalta la importancia de la igualdad de género en la sociedad actual.
El portavoz del Ayuntamiento, Juan Carlos Caballero, ha enfatizado que la igualdad no debe ser vista como un objetivo distante, sino como una responsabilidad diaria que debemos asumir todos.
La Junta de Gobierno local ha aprobado por unanimidad la adhesión a este significativo documento que aborda la situación actual de las mujeres en España, así como la urgente necesidad de fortalecer las políticas de igualdad.
En el contexto actual, donde la brecha salarial sigue siendo alarmante y las mujeres continúan asumiendo una carga desproporcionada en tareas no remuneradas, esta declaración busca poner de relieve la importancia de garantizar servicios de calidad que faciliten la conciliación entre la vida laboral, familiar y personal de las mujeres.
Juan Carlos Caballero ha subrayado que es fundamental fomentar la educación en igualdad desde una edad temprana, inculcando valores de respeto para prevenir cualquier forma de discriminación.
Esta declaración también menciona la necesidad de que las administraciones locales desempeñen un papel crucial en la promoción de la igualdad y la corresponsabilidad, garantizando así el pleno ejercicio de los derechos de las mujeres.
Abierto el plazo para enviar buenas prácticas de igualdad en la gestión convocadas por Emakunde y Euskalit
Se ha abierto el plazo para presentar buenas prácticas de igualdad en la gestión, convocadas por Emakunde y Euskalit. Esta iniciativa busca fomentar la incorporación de la perspectiva de género en la prevención de riesgos laborales, con el objetivo de mejorar la seguridad y salud de las personas que trabajan en las empresas. La incorporación de la igualdad en la gestión preventiva implica seguir una serie de pautas. Entre ellas, destacan definir la política de prevención de la empresa con perspectiva de género, favorecer la participación representativa de las mujeres en los procesos de gestión de la seguridad y salud laborales, y desarrollar formación sobre género y salud laboral para los equipos de prevención y toda la plantilla. Es importante desagregar los datos por sexo y analizar las posibles diferencias en las condiciones de trabajo, la exposición a riesgos y los daños a la salud. También se recomienda contar con personas con conocimientos y experiencia sobre salud laboral con perspectiva de género en los equipos preventivos, y adoptar medidas para evitar la desigualdad de género en la empresa. Además, se deben tener en cuenta factores sociales como la sobrecarga de trabajo de cuidados, la sobreexposición química, la violencia machista fuera del trabajo y los roles y estereotipos de género, que pueden incrementar los riesgos laborales. También se debe proteger la salud reproductiva, el embarazo y la lactancia, y desarrollar medidas preventivas y de actuación contra el acoso sexual y por razón de sexo. La fecha límite para presentar candidaturas es el 17 de julio. Aquellas empresas que estén llevando a cabo una buena gestión preventiva e incorporen la perspectiva de género pueden enviar su candidatura para formar parte del buscador de igualdad en la gestión promovido por Emakunde y Euskalit. Para más información y para presentar candidaturas, se puede acceder al sistema web de recogida de candidaturas habilitado por las entidades mencionadas anteriormente.El documento se estructura en cinco puntos clave que abordan temas como el reconocimiento de derechos, la educación y formación, y la participación social y política.
La participación activa de las mujeres en todos los niveles es considerada esencial, y se hace un llamado a incrementar su representación en puestos directivos y a apoyar el emprendimiento femenino.
Además, se presta especial atención a las mujeres que residen en áreas rurales y a aquellas con discapacidad, reconociendo que enfrentan desafíos adicionales para alcanzar sus reivindicaciones.
Este enfoque inclusivo refleja un compromiso por parte de la FEMP de atender las necesidades específicas de estos grupos. Por último, la declaración insiste en que la colaboración entre instituciones y el compromiso colectivo son vitales para lograr una igualdad efectiva.
Se necesita una acción coordinada entre todas las administraciones públicas, la sociedad civil y el sector privado para alcanzar un progreso sostenible y duradero.
El mensaje final de la declaración es claro: la FEMP se compromete a implementar medidas concretas que refuercen los derechos de las mujeres y niñas, con el objetivo de construir una sociedad más justa y diversa.
La igualdad no es un sueño lejano, sino una lucha diaria que requiere la participación de todos para asegurar que las mujeres y niñas sean protagonistas de su propio futuro.