El Ayuntamiento de Valencia avanza en la apertura del nuevo polideportivo de Nou Moles, una instalación esperada por más de una década que promete mejorar la oferta deportiva de la zona.

El Ayuntamiento de Valencia está a punto de recibir el polideportivo de Nou Moles, una instalación que ha sido objeto de una larga espera de 13 años desde que comenzara su construcción.

Este significativo paso se espera que sea aprobado por la Junta de Gobierno Local en una reunión programada para mañana, con la intención de que el polideportivo esté en funcionamiento antes de que finalice el año.

La concejala de Deportes, Rocío Gil, detalló que la apertura del polideportivo no solo simboliza la culminación de un proceso largo y complicado, sino que también responde a un reclamo que ha persistido por años en la comunidad.

Gil enfatizó que "tras más de 13 años de dificultades, estamos avanzando hacia la apertura y finalizando una etapa de bloqueo". En este sentido, la instalación se convertirá en un espacio clave para fomentar la actividad física y el deporte en la zona.

El complejo cuenta con un pabellón con capacidad para albergar a 1.600 espectadores, una piscina de 30 metros, un área de chapoteo, vestuarios, salas de musculación, y dos espacios dedicados a fitness, además de una zona de vending y varias oficinas.

La inversión inicial del Ayuntamiento en el polideportivo ya supera los 850,000 euros (aproximadamente 920,000 dólares), y se prevé que se destinen otros 250,000 euros (alrededor de 275,000 dólares) en las próximas semanas.

A pesar de estos avances, Gil mencionó que un recurso administrativo presentado por el grupo municipal Socialista ha ocasionado retrasos significativos, complicando el proceso de apertura.

Aun así, la concejala se comprometió a trabajar contrarreloj para que la situación se resuelva sin seguir afectando a los vecinos, quienes finalmente tendrán acceso a un espacio deportivo de calidad.

El polideportivo es parte de un plan más amplio de renovación de infraestructuras deportivas en Valencia, que ha sido necesario tras la identificación de múltiples problemas de gestión y mantenimiento en diversas instalaciones.

Gil recordó que, al asumir su cargo hace un año, se encontró con que muchos convenios para la gestión de instalaciones deportivas estaban caducados, generando una importante inseguridad jurídica para clubes y federaciones.

El desafío no solo se limita al polideportivo de Nou Moles.

La administración local ha puesto en marcha una serie de reformas en otros equipamientos, incluyendo la remodelación del Polideportivo de Marxalenes, el Polideportivo de Abastos, y la Hípica, que será totalmente renovada para cumplir con las nuevas legislaciones y necesidades de la comunidad.

En total, estas reformas representan una inversión sustancial de más de 3.3 millones de euros (aproximadamente 3.5 millones de dólares) y un compromiso renovado por parte del Ayuntamiento para mejorar la calidad de las instalaciones deportivas en la ciudad.

Esto se traduce no solo en mejores espacios para la práctica del deporte, sino también en un esfuerzo importante por regularizar la gestión de las instalaciones y asegurar que los clubes y usuarios puedan operar con mayor estabilidad.

A medida que se acerca el final del año, la apertura del polideportivo de Nou Moles se establece como un hito significativo en la revitalización del deporte en Valencia.

La comunidad espera con ansias el día en que esta nueva instalación se convierta en un punto de encuentro para el deporte y la actividad física.