El 5 de diciembre de 2024, en la ciudad de Valencia, se llevó a cabo la presentación de la restauración del célebre lienzo "La Inmaculada Concepción y los Jurados de València". Esta obra, creada por el artista Jeroni Jacint Espinosa en 1662, ha sido sometida a un proceso de restauración minucioso durante el último año, realizado en las instalaciones del Museo Histórico Municipal.

La alcaldesa de Valencia, María José Catalá, estuvo presente en el acto, acompañada por el concejal de Acción Cultural, José Luis Moreno.

Durante su intervención, Catalá enfatizó la relevancia histórica de esta pintura, considerándola una de las piezas más significativas del patrimonio cultural valenciano.

La pieza no solo refleja la rica tradición pictórica del barroco en la región, sino que también representa un importante símbolo del gobierno municipal a lo largo de los siglos.

El lienzo había sufrido deterioro considerable debido a intervenciones previas que no hicieron justicia a su valor artísticos, así como a las diversas localizaciones donde fue exhibido a lo largo de su historia.

La presentación también contó con la participación de Pablo González Tornel, director del Museo de Bellas Artes de Valencia, y Sofía Martínez Hurtado, representante de la empresa de restauración Noema Restauradores SL, quien detalló el proceso realizado.

La restauración fue visible al público, lo que permitió que ciudadanos y visitantes pudieran apreciar cómo se devolvía el esplendor a esta importante obra.

La impresión final alcanzada es una representación de la Inmaculada Concepción rodeada por los jurados de la ciudad, es decir, los antiguos concejales en un gesto de defensa del dogma de la Inmaculada, un hecho histórico de gran relevancia en el año 1661, cuando la fe en esta creencia comenzó a ganar fuerza entre los jurados de Valencia.

Esta fecha marca un hito en la historia local, donde el embajador del rey Felipe IV logró un decreto que fortalecía esta doctrina durante la Contrarreforma.

El lienzo, que mide 3,60 x 3,50 metros, no solo fue un encargo de los jurados, sino también un símbolo del compromiso de la ciudad con esta doctrinal.

Los jurados se comprometieron a defender la Inmaculada, y este compromiso es lo que la obra captura.

Su técnica pictórica es representativa de la tradición barroca valenciana con un estilo que refleja un excepcional realismo, haciendo que los personajes representados sean fácilmente identificables y que transmitan un sentido de autenticidad.

La restauración implicó trabajos técnicos que incluían la limpieza de la superficie, la retirada de barnices y repintes, así como la consolidación de la capa pictórica que garantiza la durabilidad de la obra.

Los especialistas de Noema Restauradores SL se encargaron de toda la intervención técnica, asegurando que se mantuvieran los métodos tradicionales de restauración y conservación.

Para la alcaldesa, la recuperación de esta pintura no solo es un acto de conservación del patrimonio, sino una representación de la historia participativa de Valencia.

"Invito a todos los valencianos a visitar esta obra maravillosa, que es parte del legado y la historia de nuestra ciudad", concluyó Catalá. La restauración de "La Inmaculada Concepción y los Jurados de València" se convierte así en un hito que reafirma el vínculo de la ciudadanía con su historia y su patrimonio.