Comienzan los trabajos de limpieza y restauración del ecosistema en l'Albufera, que busca recuperar la biodiversidad y asegurar la continuidad de actividades económicas locales.
El 19 de diciembre de 2024, en la ciudad de Valencia, se dieron por iniciados los trabajos de limpieza y recuperación de l'Albufera, tras los significativos daños causados por las recientes inundaciones.
José Gosálbez, concejal responsable de Devesa-Albufera, visitó la zona para supervisar el comienzo de estas labores, cuyo propósito primordial es la recuperación del ecosistema de l'Albufera y la restauración de su biodiversidad.
Una de las prioridades de este plan es la retirada de residuos que deben finalizar antes del 15 de marzo, pues es crucial evitar cualquier interferencia durante la temporada de nidificación de las aves que habitan esta zona.
El edil destacó la importancia de contar con máquinas especializadas que permitan que la limpieza del lago avance de manera ágil y rápida.
Estas actividades no solo buscan devolver la salud al ecosistema, sino también mantener las actividades económicas que dependen de este, como la pesca, la caza, el cultivo de arroz, la navegación y la hostelería local.
Los trabajos han comenzado en el sector Adela-Catarno, una de las zonas con acceso terrestre idóneo para la carga y extracción de los residuos dejados por la riada.
Se han previsto además limpiezas en la desembocadura de la Rambla del Poio, donde también se están comenzando las labores.
Para asegurar la eficiencia en la gestión de los resíduos, el plan de actuación se ha dividido en tres áreas geográficas, lo que facilitará la clasificación y el transporte a plantas de tratamiento específicas.
La importancia de gestionar los residuos de manera eficaz también tiene como objetivo reducir tanto las costes como el impacto ambiental.
Las estrategias que se implementen servirán para minimizar el volumen de materiales a trasladar, lo que contribuirá a un proceso más sostenible.
Según el concejal, es fundamental que las labores se realicen con celeridad para evitar la descomposición de los residuos, lo que podría provocar mayores problemas de contaminación y dañar el entorno.
Gosálbez resaltó que se está trabajando para que las actividades de pesca, caza y otros oficios locales no se vean afectadas.
Se ha garantizado a los trabajadores que, durante el tiempo que dure la limpieza, podrán continuar con sus labores sin interrupciones, fundamental para su sustento.
Las máquinas empleadas incluyen excavadoras anfibias, pontonas de carga, barcas de trabajo y segadoras, así como maquinaria convencional como giratorias y tractores con remolques.
Se estima que más de 40 personas estarán operando simultáneamente, utilizando alrededor de veinte máquinas en acción.
Este esfuerzo de limpieza no solo se limita a los residuos visibles, ya que se estima que en total, la Albufera ha acumulado más de 87,000 m³ de cañas y vegetación, además de serios problemas por residuos plásticos y otros materiales contaminantes.
La magnitud de la tarea es significativa, ya que el plan de regeneración abarca una extensión de 170,000 m². Se contempla un gasto de aproximadamente 8.501.399,18 euros para concluir este ambicioso proyecto de recuperación ambiental.