Las autoridades de Nueva York llevan a cabo la mayor operación policial contra el comercio ilegal de productos de vapeo, arrestando a una docena de personas y presentando 38 cargos criminales por envíos no autorizados de vaporizadores que violan la legislación estatal.

La operación, liderada por el Departamento de Salud del Estado en colaboración con la Policía Estatal, ha resultado en más de una docena de arrestos y la presentación de un total de 38 cargos criminales relacionados con el envío no autorizado de vaporizadores y líquidos en violación de las leyes estatales.
Supuestamente, esta acción surge como respuesta a años de proliferación de productos de vapeo ilegales que, según informes no confirmados, han llegado a manos de menores de edad en distintas regiones del estado, desde el oeste de #Nueva York hasta Long Island.
La investigación, que supuestamente duró varios meses, incluyó compras encubiertas en línea y análisis de envíos que violaban claramente las regulaciones existentes.
Entre los productos interceptados se encuentran cigarrillos electrónicos desechables de colores brillantes y líquidos en sabores que supuestamente atraen a los jóvenes, como frutas, caramelos, refrescos y postres.
Estos productos, presuntamente comercializados a través de sitios web, redes sociales y aplicaciones móviles, incluyen modelos con pantallas digitales y otras funciones tecnológicas similares a las de teléfonos inteligentes y videojuegos portátiles, lo que los hace especialmente atractivos para niños, adolescentes y adultos jóvenes.
Los acusados, cuyos nombres no han sido divulgados por las autoridades, son considerados inocentes hasta que se demuestre su culpabilidad en un tribunal.
El Comisionado de Salud de Nueva York, el Dr. James McDonald, afirmó que "la amplia disponibilidad de cigarrillos electrónicos y vaporizadores representa un desafío importante para la #salud pública, especialmente por sus efectos en los menores, como la adicción y posibles daños en sus cerebros y pulmones en desarrollo".
Supuestamente, estas detenciones reflejan el compromiso del estado en reducir el consumo de vapeo entre los jóvenes.
Por su parte, el Superintendente de la Policía Estatal, Steven G. James, expresó que "las prácticas comerciales ilícitas no son justas para quienes siguen la ley y han invertido en sus negocios legítimos. Varias entregas ilegales de productos de vapeo han llegado a manos de menores de 21 años, poniendo en riesgo su salud y seguridad. No toleraremos esto en Nueva York".
La operación ha centrado sus esfuerzos en 12 negocios distribuidos en diferentes regiones del estado, algunos con tiendas físicas abiertas al público.
Entre las localidades afectadas se encuentran Manhattan, Brooklyn, Bronx, Staten Island, Albany, Fulton County, Erie y Niagara County. Se han presentado 28 cargos criminales hasta la fecha, con 10 cargos adicionales pendientes, y se prevé que en los próximos días se realicen más arrestos y órdenes de detención.
Supuestamente, estas acciones se complementan con otras medidas estatales, como el aumento de la edad legal para comprar productos de tabaco y vapeo a 21 años y la subida del impuesto sobre los cigarrillos en aproximadamente 10 euros por paquete, efectiva desde septiembre de 2023.
Además, se han destinado fondos de acuerdos legales con empresas como JUUL para financiar programas educativos, campañas de prevención y esfuerzos de enforcement en toda la región.
Nueva York ha sido pionera en la regulación del tabaco y el vapeo
Desde hace décadas, Nueva York ha sido pionera en la regulación del tabaco y el vapeo. La #legislación estatal, que data de principios de los años 2000, fue una de las primeras en Estados Unidos en prohibir fumar en espacios cerrados y restringir la venta a menores.
La reciente ola de regulaciones, incluyendo la prohibición de sabores en productos de vapeo y la imposición de multas severas, busca reducir significativamente el acceso y atractivo de estos productos para los jóvenes.
Supuestamente, el aumento en los esfuerzos policiales y las campañas educativas forman parte de una estrategia integral para proteger a la población adolescente.
La administración estatal también ha promovido recursos gratuitos para quienes desean dejar de vapear, como líneas de ayuda y plataformas en línea, en un intento por reducir la dependencia y promover un estilo de vida más saludable.
En conclusión, esta histórica operación en Nueva York refleja la gravedad del problema del comercio ilegal de productos de vapeo y la determinación del estado en combatirlo, especialmente en una época en la que la prevención en salud pública es más crucial que nunca.