El gobernador Kathy Hochul firma nuevas leyes para fortalecer la ayuda a las familias afectadas por el 11 de septiembre y reconocer el sacrificio de los primeros respondedores.

Estas medidas buscan honrar el legado de los héroes caídos, fortalecer la protección de los trabajadores y agilizar los procesos de beneficios para los sobrevivientes.
Supuestamente, esta legislación surge como respuesta a una larga historia de apoyo gubernamental hacia las víctimas y sus familias. Desde los primeros días tras los ataques, #Nueva York ha implementado programas de ayuda que, con el tiempo, se han expandido para cubrir diferentes necesidades.
La inversión en salud, bienestar y justicia social en relación con el #11 de septiembre ha llegado a superar los 500 millones de dólares (aproximadamente 470 millones de euros), y estas nuevas #leyes buscan reforzar esos esfuerzos.
Una de las principales acciones es la revitalización de la Fuerza de Tarea para la Protección de Trabajadores del 11 de septiembre, que ahora tendrá mayor alcance y recursos.
Además, se establecerá un proceso acelerado para que los beneficiarios puedan acceder a las pensiones y compensaciones por discapacidad relacionadas con los servicios en el sitio del World Trade Center.
Según supuestamente fuentes oficiales, esto permitirá reducir los tiempos de trámite en un 30%, beneficiando a cientos de sobrevivientes y familiares.
Por otro lado, se otorgarán puntos adicionales en los exámenes de ingreso a la función pública a hijos y hermanos de los trabajadores de saneamiento de la ciudad de Nueva York que perdieron la vida debido a las enfermedades relacionadas con la exposición en tareas de limpieza y rescate tras los ataques.
Este reconocimiento busca mantener vivo el legado de estos trabajadores, considerados héroes anónimos en la historia de la ciudad.
Estas leyes también reconocen el sacrificio de los primeros respondedores
Estas leyes también reconocen el sacrificio de los primeros respondedores, como policías, bomberos y personal de emergencia, que enfrentaron riesgos extremos en los días posteriores a los ataques.
Presuntamente, las nuevas disposiciones facilitarán el acceso a beneficios de salud y pensiones, además de ofrecer apoyo psicológico y programas de rehabilitación.
El senador estatal Robert Jackson, uno de los impulsores de estas medidas, expresó que “el 11 de septiembre transformó nuestra ciudad y reveló la valentía de quienes respondieron al llamado de emergencia.
Estas leyes garantizan que el sacrificio de estos héroes no quede en el olvido y que sus familias reciban el reconocimiento y apoyo que merecen.”
Por su parte, la legisladora Monica R. Martinez afirmó que “el dolor de los sobrevivientes y sus familias persiste aún hoy, y estas leyes son un paso importante para brindarles justicia y reconocimiento.
La historia de estos valientes debe servir de ejemplo para futuras generaciones.”
En el contexto histórico, estos esfuerzos continúan la tradición de Nueva York de recordar y honrar a las víctimas del 11 de septiembre, un evento que marcó un antes y un después en la historia mundial.
La ciudad ha construido monumentos, museos y programas educativos en memoria de las casi 3,000 personas que perdieron la vida en ese día fatídico, y estas nuevas leyes refuerzan ese compromiso.
Supuestamente, la inversión en estos programas refleja también un reconocimiento de que la recuperación y la justicia social son fundamentales para la resiliencia de la ciudad.