El gobernador Kathy Hochul advierte sobre una ola de calor que afectará varias regiones de Nueva York, con temperaturas que podrían superar los 38°C, y anuncia medidas para garantizar la seguridad de los residentes durante estos días de intenso calor.

Se espera que las temperaturas percibidas superen los 38°C en varias áreas, lo que representa un riesgo significativo para la #salud pública y la #seguridad de la población.
Este fenómeno climático, presuntamente provocado por patrones atmosféricos inusuales y el incremento de las temperaturas globales, ha llevado a las autoridades a intensificar las medidas preventivas.
Se prevé que, durante el martes, las alertas de calor se expandan a gran parte del estado, incluyendo regiones como el sur del estado, Mohawk Valley, Central New York, Finger Lakes y Western New York, donde las temperaturas percibidas podrían variar desde los 33°C hasta más de 38°C.
Supuestamente, las temperaturas extremas en verano son responsables de la mayoría de las muertes relacionadas con el #clima en Estados Unidos, y en #Nueva York no es la excepción.
Las enfermedades relacionadas con el calor, como el golpe de calor, agotamiento, calambres y erupciones cutáneas, aumentan en estas condiciones. La Secretaría de Salud del estado ha puesto en marcha diversas acciones para mitigar estos riesgos, incluyendo la promoción de puntos de enfriamiento y campañas de concienciación sobre cómo actuar ante el calor.
Las agencias estatales están coordinando esfuerzos para hacer frente a esta situación. La División de Seguridad Nacional y Servicios de Emergencia mantiene contacto con los gestores de emergencias en los condados para garantizar que los centros de enfriamiento estén disponibles y en funcionamiento.
Además, se están realizando preparativos y campañas informativas para alertar a la población sobre los riesgos y las medidas preventivas.
Por su parte, el Departamento de Servicios Públicos de Nueva York ha comenzado a monitorear las condiciones del sistema eléctrico, asegurando que las utilidades puedan atender la demanda adicional provocada por el uso masivo de aire acondicionado.
Presuntamente, en 2013, durante una ola de calor similar, la demanda eléctrica alcanzó los 33.956 MW, suficiente para abastecer a cerca de un millón de hogares en el estado.
Las empresas eléctricas cuentan con aproximadamente 5.500 trabajadores preparados para responder ante posibles daños o interrupciones en el suministro eléctrico. La sobrecarga del sistema en días de altas temperaturas puede provocar bajas de voltaje o cortes aislados, por lo que las autoridades recomiendan a los residentes mantenerse informados y tomar precauciones.
El Departamento de Salud Pública ha activado un panel interactivo que permite a los habitantes y a los profesionales de la salud evaluar el nivel de riesgo de enfermedades relacionadas con el calor en sus áreas
En el ámbito de la salud, el Departamento de Salud Pública ha activado un panel interactivo que permite a los habitantes y a los profesionales de la salud evaluar el nivel de riesgo de enfermedades relacionadas con el calor en sus áreas.
Además, el gobernador Hochul ha ordenado extender el horario de apertura en varias instalaciones recreativas y parques para facilitar a los residentes la opción de refrescarse y escapar del calor.
En Long Island, lugares como Jones Beach, Robert Moses y Sunken Meadow ofrecen horarios extendidos para natación y actividades de enfriamiento, hasta las 20:00 horas, siempre verificando las condiciones del agua y el clima.
En la región del Valle del Hudson, parques como Bear Mountain y Franklin D. Roosevelt también han ampliado sus horarios, promoviendo la seguridad y el disfrute responsable.
Asimismo, en la ciudad de Nueva York, parques como Gantry Plaza y Riverbank State Park han instalado rociadores y ventiladores de niebla para reducir el impacto del calor en los visitantes.
Los sistemas de transporte también están en alerta máxima; la Autoridad Metropolitana de Transporte (MTA) ha implementado patrullas especiales para inspeccionar vías y estaciones, garantizando que los sistemas de aire acondicionado en trenes y autobuses funcionen correctamente.
Supuestamente, estos esfuerzos forman parte de un plan integral para reducir los riesgos asociados a las altas temperaturas y asegurar que los servicios esenciales continúen operando sin interrupciones.
Se recomienda a los residentes mantenerse hidratados, evitar la exposición directa al sol durante las horas pico y acudir a los centros de enfriamiento en caso de sentirse mal.
En conclusión, las autoridades de Nueva York están tomando todas las medidas posibles para proteger a su población ante este evento climático extremo, que supuestamente puede tener consecuencias graves si no se toman las precauciones adecuadas.