Las temperaturas extremas previstas para este fin de semana en Nueva York podrían alcanzar niveles peligrosos, superando los 40 grados Celsius, y las autoridades instan a la población a tomar precauciones para evitar riesgos de salud y cortes de energía.

Imagen relacionada de nueva ola de calor en nueva york amenaza con temperaturas que superan los 40 grados celsius

El Servicio Meteorológico Nacional ha alertado sobre un riesgo alto a extremo de impactos relacionados con el calor, que comenzará desde el domingo 22 de junio y se extenderá, al menos, hasta el miércoles 25.

Las previsiones apuntan a temperaturas máximas en muchas áreas en los 30s en grados Celsius, con sensaciones térmicas que podrían acercarse o superar los 40 grados en algunos lugares.

Este tipo de temperaturas, que en Fahrenheit equivaldrían a cerca de 105 grados, representan un riesgo significativo para la salud, especialmente para los grupos más vulnerables.

Históricamente, las olas de calor extremas han provocado un aumento en las tasas de mortalidad y han puesto a prueba la infraestructura urbana. Por ejemplo, en 2006, la ola de calor en #Nueva York causó más de 600 muertes, en su mayoría entre personas mayores y residentes sin acceso a aire acondicionado.

Los expertos advierten que el cambio climático ha agravado la frecuencia e intensidad de estos eventos, y las autoridades deben prepararse para afrontar estas condiciones cada vez más comunes.

Desde la oficina del gobernador Kathy Hochul, se ha emitido una alerta para que la población tome medidas preventivas. Se recomienda mantenerse en lugares frescos, preferiblemente con aire acondicionado, y evitar salir durante las horas de mayor calor, que generalmente son entre las 11 de la mañana y las 4 de la tarde.

Además, las autoridades están habilitando centros de enfriamiento en diferentes comunidades, especialmente en zonas donde el acceso a sistemas de refrigeración es limitado.

Aquellas personas que no cuenten con aire acondicionado y presenten síntomas de golpe de calor deben acudir inmediatamente a estos centros.

El gobierno también ha lanzado un programa especial para ayudar a personas con condiciones preexistentes, como asma persistente, a acceder a unidades de aire acondicionado gratuitas.

La red eléctrica del estado está en máxima alerta para evitar cortes de energía, ya que el aumento en el uso de aire acondicionado puede sobrecargar la infraestructura.

Más de 5,000 trabajadores del sector eléctrico están en disposición para responder a cualquier emergencia.

Long Island Railroad y el sistema de metro de Nueva York reforzarán sus inspecciones y monitorearán áreas críticas

El transporte público no queda exento de los riesgos. Metro North, Long Island Railroad y el sistema de metro de Nueva York reforzarán sus inspecciones y monitorearán áreas críticas, como subestaciones eléctricas y salas de máquinas, para garantizar el funcionamiento adecuado de los sistemas de climatización en trenes y autobuses.

También se intensificarán las revisiones en cada uno de los vehículos y estaciones, para garantizar que los usuarios puedan viajar en condiciones seguras y con aire acondicionado funcionando.

Por otro lado, las autoridades llaman a las empresas y empleadores a ajustar horarios de trabajo en exteriores, especialmente para los trabajadores de la vía pública, como empleados del Departamento de Transporte y la Autoridad de Carreteras.

Se recomienda también que los ciudadanos presten atención a las señales de golpes de calor, que incluyen mareos, sudoración excesiva, confusión y pérdida de conciencia.

El martes 25 de junio es día de elecciones primarias en Nueva York, y las autoridades sugieren a los votantes que aprovechen las opciones de votación anticipada o las boletas por correo para evitar las largas filas en condiciones de calor extremo.

En cuanto a la salud, los expertos recomiendan mantenerse hidratados en todo momento, evitando bebidas con cafeína o alcohol, y vestir ropa ligera y de colores claros.

Es fundamental también cuidar a las mascotas y a los niños, no dejarlos en vehículos estacionados y asegurarse de que permanezcan en lugares frescos.

La historia nos muestra que las olas de calor no solo afectan la salud, sino también la economía y la infraestructura. La ciudad de Nueva York, con su historia de eventos climáticos extremos, ha implementado diversas medidas para mitigar estos riesgos, pero la responsabilidad también recae en cada ciudadano.

La colaboración, la información y la prevención son las mejores armas contra las altas temperaturas.