Un volcán en Islandia ha entrado en erupción por cuarta vez desde diciembre, expulsando humo y lava brillante en el aire en contraste con el oscuro cielo nocturno.

Imagen relacionada de volcan islandes entra en erupcion por cuarta vez desde diciembre

Un volcán en Islandia ha entrado en erupción por cuarta vez desde diciembre, algo que los expertos dicen que podría convertirse en algo habitual en la región.

En un video grabado desde un helicóptero de la Guardia Costera y mostrado en la emisora pública RUV, fuentes de roca fundida se elevaron desde una larga fisura en el suelo y la lava se extendió rápidamente a cada lado.

La erupción comenzó a las 20:23 hora local y se estimó que la fisura tenía unos 2,9 kilómetros de longitud, aproximadamente el mismo tamaño que la última erupción en febrero, informó la Oficina Meteorológica de Islandia en un comunicado.

Las autoridades habían advertido durante semanas que una erupción era inminente en la península de Reykjanes, justo al sur de la capital de Islandia, Reykjavik.

El sitio de la erupción estaba entre Hagafell y Stora-Skogfell, la misma área que el brote anterior del 8 de febrero, dijo la Oficina Meteorológica.

La ciudad cercana de pesca de Grindavik estaba siendo evacuada nuevamente, según informó la emisora pública RUV.

El volcán entró en erupción a las 8:23 pm hora local y la fisura se estimaba en unos 2,9 kilómetros de largo, aproximadamente el mismo tamaño de la última erupción en febrero.


La Oficina Meteorológica islandesa también señaló que las imágenes muestran cómo la lava fluye rápidamente hacia el sur, hacia la ciudad de Grindavik.

Las autoridades han declarado el estado de emergencia en la zona y la autoridad de Defensa Civil ha enviado un helicóptero para evaluar la magnitud de la erupción.

Además, el lujo del Balneario Blue Lagoon de Islandia cerró sus puertas inmediatamente, como lo hizo durante erupciones anteriores.

Este tipo de erupciones, denominadas fisuras, no suelen causar grandes explosiones ni dispersión significativa de cenizas a la estratosfera.

Los gases de la erupción están viajando hacia el oeste, mar adentro, según la oficina meteorológica.

Los científicos temen que las erupciones puedan continuar durante décadas y las autoridades islandesas han comenzaron a construir diques para desviar el flujo de lava ardiente lejos de las viviendas e infraestructuras críticas.

La actividad sísmica y volcánica de Islandia se debe a su ubicación entre las placas tectónicas euroasiática y norteamericana, dos de las más grandes del planeta, que se desplazan en direcciones opuestas.