El terremoto más fuerte en un cuarto de siglo sacudió Taiwán durante la hora pico de la mañana el miércoles, matando a nueve personas, dejando atrapados a algunos trabajadores y dañando decenas de edificios. El terremoto también hirió a más de 1,000 personas.
Durante la hora pico de la mañana del miércoles, un fuerte terremoto sacudió Taiwán, dejando al menos 9 muertos y cientos de heridos.
El terremoto tuvo una magnitud de 7,2 según la agencia de monitoreo de terremotos de Taiwán, y de 7,4 según el Servicio Geológico de los Estados Unidos.
El epicentro se ubicó a unos 18 kilómetros de Hualien, en la costa este de Taiwán, y tenía unos 35 kilómetros de profundidad.
La agencia de bomberos nacional de Taiwán informó que nueve personas murieron en el terremoto.
El informe local del United Daily News indicó que tres excursionistas murieron en desprendimientos de rocas en el Parque Nacional Taroko y un conductor de furgoneta murió en la misma zona después de que las rocas golpearan el vehículo.
Además de los fallecidos, más de 1.000 personas resultaron heridas.
Las autoridades también perdieron inicialmente el contacto con 50 empleados de hoteles en minibuses en el parque nacional después de que el terremoto derribara las redes telefónicas.
Tres de los empleados lograron llegar caminando al hotel, mientras que los demás quedaron atrapados.
El terremoto y las réplicas también provocaron 24 deslizamientos de tierra y daños en carreteras, puentes y túneles.
En la ciudad de Hualien, 48 edificios residenciales resultaron dañados, mientras que seis aviones de combate F-16 de la fuerza aérea de Taiwán resultaron ligeramente dañados en una base importante de la ciudad.
Las plantas de fabricación de Taiwan Semiconductor Manufacturing Co también tuvieron que ser evacuadas.
A pesar de la magnitud del desastre, la mayoría de las líneas del sistema de trenes de alta velocidad de Taiwán reanudaron el servicio.
La magnitud del terremoto y la evacuación que se derivó llevó a la agencia oficial de noticias central de Taiwán a describir el suceso como el mayor terremoto desde el de 1999, que mató a unas 2,400 personas y dañó o destruyó 50,000 edificios.
Según los oficiales de clima de Taiwán, el terremoto del miércoles en Hualien alcanzó un nivel de intensidad 'Alto 6', el segundo más alto en una escala que va de 1 a 7.
El terremoto generó una alerta de tsunami para el sur de Japón y las Filipinas que posteriormente fue levantada.
En Japón, la agencia meteorológica informó que varias pequeñas olas de tsunami llegaron a partes de la prefectura sureña de Okinawa.
En las Filipinas, los funcionarios de sismología advirtieron a los residentes costeros de varias provincias que se trasladaran a terrenos más altos.
Los efectos del terremoto también se sintieron en la provincia sureste de Fujian en China, así como en la metrópolis comercial de Shanghái.