Investigación revela que los colchones para niños pueden liberar químicos peligrosos que afectan su salud. Se recomiendan medidas de mitigación.

Un nuevo estudio canadiense ha generado preocupación acerca de la calidad de los colchones infantiles, sugiriendo que los bebés y niños de hasta cuatro años podrían estar inhalando y absorbiendo productos químicos dañinos, incluidos plastificantes, mientras duermen.
La investigación, realizada por un equipo liderado por Miriam Diamond, química ambiental de la Universidad de Toronto, encontró que ciertos colchones en el mercado canadiense contenían sustancias prohibidas y reguladas.
Desde el inicio de la fabricación de colchones modernos, ha habido un interés creciente en asegurar que estos productos sean seguros, especialmente para los más pequeños.
De acuerdo con la investigación presentada en la revista Environmental Science & Technology, se analizaron 16 colchones para evaluar la liberación de compuestos químicos perjudiciales en el espacio donde los niños duermen.
Los hallazgos indicaron que dos de los colchones analizados no cumplían con las regulaciones canadienses sobre plastificantes, un grupo de productos químicos utilizados para aumentar la flexibilidad de ciertos materiales.
Las regulaciones establecen límites en algunos ftalatos, un tipo de plastificante, debido a su potencial impacto negativo tanto en la salud humana como en el medio ambiente.
Por ejemplo, estudios previos han mostrado una relación entre la exposición a ftalatos presentes en el polvo del hogar y un mayor riesgo de asma en los niños.
Dado que los niños pueden estar en contacto cercano con su colchón hasta 18 horas al día, el riesgo de inhalar estos productos químicos es mayor, ya que los niños inhalan aire en proporciones significativas en comparación con los adultos.
Además de los ftalatos, los investigadores también encontraron altos niveles de tris(2-cloroetilo) fosfato (TCEP), un químico que ha sido prohibido en Canadá desde 2014 debido a sus propiedades carcinogénicas.
Éxito en intervención quirúrgica conjunta a adolescente de 13 años
La Unidad de Coloproctología del Hospital Universitario de La Princesa y el Servicio de Cirugía Pediátrica del Hospital Universitario Infantil Niño Jesús han llevado a cabo una exitosa colectomía laparoscópica a un niño de 13 años con Enfermedad Inflamatoria Intestinal. Esta colaboración entre ambos hospitales provee la mejor asistencia médica para los pacientes con esta patología.Esto destaca la necesidad de que los padres sean conscientes de los productos que eligen para el descanso de sus hijos, ya que la exposición a estos químicos puede ocurrir no solo por inhalación, sino también a través del contacto dérmico y la ingestión accidental.
Diamond sugiere que los padres implementen medidas de mitigación como lavar frecuentemente la ropa de cama y los pijamas, que pueden actuar como barreras protectoras, y aconseja reducir la cantidad de objetos en la cama de los niños para limitar la exposición a estos compuestos.
Asimismo, hace un llamado a los fabricantes para que mejoren la supervisión de sus productos y se adhieran a las regulaciones establecidas, asegurando que solamente utilicen químicos cuando sea estrictamente necesario y minimizando la contaminación accidental durante el proceso de fabricación.
El debate sobre la seguridad de los productos destinados a niños pequeños no es nuevo y ha cobrado relevancia en los últimos años, a medida que aumentan las preocupaciones sobre las sustancias químicas en productos cotidianos.
Organizaciones como Health Canada están tomando nota de estos hallazgos y realizan revisiones exhaustivas de la información disponible para identificar posibles riesgos para la salud pública y asegurar el cumplimiento de la normativa.
Con el objetivo de proteger a la población, es vital que tanto consumidores como productores presten atención a la composición de los productos que están comprando o fabricando.
Este estudio representa un paso importante en la búsqueda de un entorno más saludable para los niños, quienes son más vulnerables debido a sus cuerpos en desarrollo.