Un reciente brote de gripe aviar de alta peligrosidad ha causado la muerte de cientos de aves en Saskatchewan, Canadá, y ha generado medidas de cuarentena en varias granjas avícolas. La situación ha despertado preocupación en el sector y alerta sobre la posible propagación del virus.

Durante la primavera, en la provincia canadiense de Saskatchewan, se han registrado casos alarmantes de mortalidad en aves silvestres, específicamente en gansos Ross.
Se han encontrado cientos de ejemplares muertos cerca de Lipton, ubicada a unos 90 kilómetros al noreste de Regina. Los análisis de laboratorio confirmaron que estas aves fallecieron por la presencia del virus de la gripe aviar del tipo H5, una cepa altamente patógena que ha venido afectando tanto a aves silvestres como a explotaciones de aves domésticas.
Este incremento en la mortalidad, que en algunos casos ha alcanzado a cientos de aves en un solo sitio, resulta inusual y ha sido motivo de preocupación por parte de expertos en salud animal y conservación.
La especialista en salud silvestre, Iga Stasiak, manifestó que la intensificación de los casos en aves silvestres podría deberse a la virulencia de la cepa actual, que parece afectar con mayor severidad a las especies migratorias.
Aunque las cifras todavía no alcanzan los niveles de 2022, cuando Canadá enfrentó una crisis similar por la introducción del virus, el aumento en la mortalidad es significativo y requiere atención.
La gripe aviar se transmite fundamentalmente a través del contacto con material contaminado como excrementos, agua o alimento infectado, así como mediante la exposición en ropa, vehículos y equipos de humanos que visitan las zonas afectadas.
Los síntomas en las aves incluyen letargo, temblores, dificultad para respirar y muerte súbita. En el caso de Saskatchewan, las aves infectadas identificadas en Lipton han sido principalmente gansos Ross.
Además de los casos en aves silvestres, las autoridades sanitarias han detectado presencia del virus en la avicultura local, motivo por el cual se han establecido cuarentenas en tres explotaciones avícolas.
Una de estas granjas se encuentra en la región del RM de Lipton, en un sitio no destinado a actividades comerciales ni a producción de pollo o pavo. Las otras dos granjas afectadas están en las regiones de Colonsay e Indian Head. Estas medidas buscan evitar la propagación del virus al sector comercial, que representa una parte importante de la economía local.
El impacto del virus en la industria avícola preocupa seriamente a los productores, quienes temen pérdidas económicas considerables. Michael Kautzman, director ejecutivo de los Agricultores de Pollo de Saskatchewan, expresó la gravedad del brote, señalando que una vez infectadas, las aves suelen morir rápidamente, lo que genera una enorme incertidumbre y estrés en los granjeros.
La gripe aviar se expande por toda Columbia Británica, poniendo en peligro a las aves de corral, aves rapaces y otros animales salvajes
La gripe aviar se propaga cada vez más por las granjas avícolas en Columbia Británica, lo que alarmará a los expertos en vida silvestre sobre el impacto mortal del virus en los animales salvajes y la posible amenaza de que se convierta en otra pandemia entre los humanos.Para reducir riesgos, las organizaciones del sector han reforzado los protocolos de bioseguridad, incluyendo la limitación de visitantes, así como la desinfección de vehículos y ropa.
El virus detectado en Saskatchewan corresponde a la misma cepa hallada en un criadero de avestruces en Columbia Británica, región que también enfrenta problemas similares en granjas de aves exóticas.
La propagación a través de las migraciones de aves silvestres, principalmente en épocas de paso migratorio, ha sido citada como una de las principales vías de expansión del virus hacia diferentes zonas del país y Estados Unidos.
Desde la comunidad científica y las autoridades de salud animal, se insiste en la necesidad de mantener estrictas medidas de control y vigilancia. La preocupación no solo abarca la perdida de biodiversidad y la posible transmisión a especies domésticas, sino también el riesgo para la salud humana, considerando la potencial mutación del virus.
Históricamente, Canadá ha enfrentado episodios de gripe aviar en distintas regiones, siendo 2022 uno de los años más críticos, con varias outbreaks en aves migratorias y explotaciones comerciales, que obligaron a sacrificios masivos para controlar la enfermedad.
La experiencia ha resaltado la importancia de la vigilancia continua y la implementación de medidas preventivas en las zonas rurales y protegidas.
A medida que avanza la temporada migratoria, las autoridades y científicos continúan monitoreando la situación con atención, conscientes de que la salud de las aves silvestres puede ser un indicador temprano de la posible expansión del virus a otras áreas y especies, incluyendo potencialmente a los humanos.
La colaboración internacional y las acciones coordinadas serán fundamentales para gestionar la crisis y reducir su impacto en los ecosistemas y la economía agrícola de Saskatchewan y más allá.