Un análisis revela cómo las tarifas comerciales de EE.UU. afectan a las economías de Japón e India, destacando su resistencia gracias a la fuerte demanda interna.

Nueva Delhi, 28 de marzo: Un reciente informe de Morgan Stanley indica que Japón e India son las economías menos expuestas a las tarifas comerciales impuestas por Estados Unidos, gracias a la sólida demanda interna que poseen.
La relación entre las exportaciones de bienes y el PIB es un indicador crucial, ya que determina el grado de orientación comercial de las economías.
Este análisis permite a las firmas de investigación global evaluar cuáles economías enfrentarán mayores presiones a la baja en su crecimiento.
El informe destaca que tanto Japón como India se benefician de un fuerte respaldo de la demanda interna, lo que compensa sus relativamente bajos índices de exportación de bienes en relación al PIB.
Esto significa que, a pesar de las adversidades que surgen de las políticas comerciales de EE.UU., ambas naciones pueden sostener un crecimiento más estable.
En particular, la administración de Donald Trump ha implementado un arancel del 25 por ciento sobre las importaciones de vehículos, lo que podría afectar de manera significativa a los fabricantes surcoreanos que dependen de los envíos a EE.UU. De acuerdo al informe, la imposición de estos aranceles impactará más a Japón y Corea, dado que las exportaciones de automóviles a EE.UU. representan el 7 por ciento de sus exportaciones totales.
El 2 de abril, se espera que la administración estadounidense proponga un plan para abordar la reciprocidad en las relaciones comerciales. Además, se ha indicado que se impondrán aranceles sectoriales sobre energía, productos farmacéuticos, semiconductores, agricultura, cobre y madera.
Según Morgan Stanley, la posible implementación de estas tarifas afectará directamente a casi todas las economías en Asia, ya sea a través de aranceles específicos por país o aranceles sectoriales.
El déficit de EE.UU. en vehículos de pasajeros, vehículos de transporte y piezas de automóviles, incluidos las baterías de vehículos eléctricos, asciende a 245 mil millones de dólares (aproximadamente 230 mil millones de euros).
De esta cifra, Asia representa un déficit de 115 mil millones de dólares (alrededor de 108 mil millones de euros), lo que equivale a un 47 por ciento del total.
Dentro de Asia, Japón, Corea y China son las tres economías que concentran la mayor parte de este déficit. Estas economías ocupan también el segundo, tercer y cuarto lugar en la lista de los diez países con los que EE.UU. presenta los mayores déficits en automóviles.
El economista jefe de Japón, Takeshi Yamaguchi, advierte que si el arancel del 25 por ciento sobre automóviles se mantiene durante un periodo prolongado y las exportaciones de automóviles a EE.UU. disminuyen entre un 15 y un 30 por ciento, esto tendría un efecto negativo de entre 0.2 y 0.3 puntos porcentuales en el crecimiento del PIB japonés. Este análisis resalta la fragilidad de las relaciones comerciales globales en un contexto de creciente incertidumbre política, que afecta las inversiones y el comercio, perjudicando así el ciclo económico.