La agencia de transporte de Canadá trabaja en nuevas normativas que permitirán vuelos de drones a larga distancia, facilitando su uso en diversas industrias.
Canadá se prepara para modificar sus regulaciones sobre el uso de drones, con la intención de facilitar vuelos de mayor distancia y más complejos a partir de 2025. Transport Canada, la agencia responsable de la aviación en el país, ha anunciado cambios significativos que prometen revolucionar la operación de aeronaves no tripuladas en áreas menos pobladas.
Estos nuevos lineamientos permitirán, por primera vez, la entrega de paquetes a gran escala, la inspección aérea y el mapeo en extensas áreas del país.
Este avance se basa en reglas iniciales que se implementaron en 2019.
Ian Wills, presidente de Coastal Drone en Langley, Columbia Británica, manifestó que "el espacio de los drones está explotando" y que estos dispositivos están evolucionando rápidamente, ganando potencia y capacidades que permitirán a los usuarios realizar actividades mucho más complejas.
Entre estas nuevas capacidades se encuentra el potencial de realizar entregas de medicamentos y suministros a regiones aisladas, algo que podría tener un impacto profundo en comunidades remotas de Canadá.
Los nuevos reglamentos, que se darán a conocer a principios de este año, eliminarán la necesidad de solicitar permisos especiales para cada vuelo que exceda la línea visual del piloto.
Hasta ahora, los operadores de drones debían completar un extenso papeleo para cada operación, lo que a menudo resultaba en un proceso burocrático muy lento.
La modificación significará que Transport Canada permitirá operaciones de bajo riesgo de más alcance, facilitando el uso de drones para diversos propósitos en áreas poco pobladas.
Se espera que esto beneficie especialmente a comunidades rurales que carecen de acceso a servicios esenciales.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que no todos los drones podrán volar en cualquier lugar.
Los pilotos deberán contar con certificaciones específicas y los drones deberán estar equipados con tecnología para evitar el tráfico aéreo.
Esta nueva normativa también contemplará límites de peso, siendo los drones capaces de operar con una carga de hasta 150 kilogramos, volando a baja altura en espacios aéreos no controlados.
Desde la introducción de las normativas iniciales en 2019, aproximadamente 107,000 pilotos de drones han sido certificados y se han registrado cerca de 100,000 drones en Canadá. Este crecimiento en la industria y en la tecnología ha llevado a un llamado progresivo para actualizar las regulaciones existentes, para facilitar aún más el uso de estas aeronaves.
Las nuevas reglas, que tratarán a los drones como aviones en términos de espacio aéreo, también restablecerán un balance en el uso, aplicándose de igual manera a pilotos comerciales y recreativos.
En el ámbito comercial, la industria aún está explorando el potencial del uso de drones en diferentes sectores.
Se prevé que sectores como la agricultura y la seguridad pública se beneficiarán enormemente de esta transformación.
Por ejemplo, en situaciones donde los drones podrían ayudar a identificar y rociar cultivos infectados, o inspeccionar instalaciones industriales sin poner en riesgo a los trabajadores.
Este tipo de avances representan un gran paso hacia un futuro donde la tecnología de drones será una herramienta cotidiana en muchas áreas de la vida.
A medida que se aproxima la implementación de estas regulaciones, un proyecto pionero en la comunidad Stellat'en First Nation ha demostrado el potencial de los drones al facilitar la entrega de suministros médicos.
En el proyecto, se realizaron más de 1,200 vuelos de prueba, en los cuales se transportaron medicamentos a personas de la comunidad que enfrentan dificultades por problemas de salud y condiciones climáticas.
Las nuevas regulaciones permitirán que este tipo de iniciativas se amplíen en otras comunidades remotas, prometiendo un acceso mejorado a recursos esenciales para aquellos que más lo necesitan.
Así, la evolución de la normativa se presenta no solo como un avance tecnológico, sino como una oportunidad real para cerrar las brechas de acceso en diversas áreas.