Nuevos estudios establecen conexiones entre las estructuras del canto de las ballenas y las características del lenguaje humano, sugiriendo una evolución compartida en la comunicación.

Imagen relacionada de investigaciones similitudes cantos ballenas lenguaje humano

Recientes investigaciones han revelado sorprendentes similitudes entre el canto de las ballenas jorobadas y el lenguaje humano. En particular, dos estudios publicados han encontrado que estas melodías exhiben estructuras compatibles con las características del lenguaje humano, enfocándose especialmente en la eficiencia y la brevedad de las composiciones.

Los científicos están cada vez más convencidos de que las presiones evolutivas pueden estar moldeando la comunicación en otras especies complejas, no solo en los humanos.

La primera de las investigaciones se realizó sobre el canto de las ballenas jorobadas, que se transmite culturalmente, lo que significa que se enseña y se modifica con el tiempo, de manera análoga a la evolución del lenguaje humano.

Este estudio, que requirió ocho años de trabajo, se sustentó en la recolección y análisis de grabaciones de un grupo de ballenas.

Los investigadores aplicaron métodos inspirados en la manera en que los humanos adquieren el lenguaje durante su infancia. Según Inbal Arnon, profesora de psicología en la Universidad Hebrea de Jerusalén, los bebés emplean razonamiento estadístico para determinar cuáles sonidos son más relevantes y cuáles tienden a suceder a otros.

Esta clase de aprendizaje ha llevado a los científicos a descubrir un patrón en el canto de las ballenas conocido como la distribución de Zipf, algo que se observa también en la frecuencia de uso de palabras en el lenguaje humano.

Simon Kirby, coautor del estudio, mencionó que esta coincidencia es sorprendente dado que las ballenas y los humanos son especies completamente diferentes.

En un segundo estudio, que fue publicado en Science Advances, se analizaron las características de eficiencia del canto de las ballenas, concluyendo que, al igual que en el lenguaje humano, las ballenas se esfuerzan por transmitir la mayor cantidad de información con la menor cantidad de sonido.

Mason Youngblood, investigador de comportamiento animal en la Universidad Stony Brook de Nueva York, destacó que el costo de cantar es elevado para estas ballenas, que deben hacerlo bajo el agua durante extensas distancias y mientras contienen la respiración.

Por ello, es crucial en su evolución comunicativa reducir al mínimo el tiempo de vocalización.

Ambos estudios sugieren que las leyes lingüísticas que observamos en los humanos, como las de Menzerath y Zipf, pueden también aplicarse a las ballenas, lo que refuerza la idea de que la evolución del lenguaje, aunque variada, podría responder a necesidades similares en distintas especies.

Shane Gero, un científico de Carleton University en Ottawa que no participó en estos estudios, subrayó el aspecto de la transmisión cultural y cómo este factor influye en el aprendizaje y la comunicación entre las ballenas.

Sin embargo, los investigadores advierten que encontrar patrones en el canto de las ballenas no implica comprender su significado. Tecumseh Fitch, biólogo cognitivo de la Universidad de Viena, sostiene que los cantos de las ballenas deberían considerarse más como melodías que como un lenguaje en el sentido estricto, ya que aunque poseen algún tipo de significado, no se equiparan a los significados de las palabras humanas.

En resumen, estos estudios no solo ofrecen una nueva perspectiva sobre la comunicación de las ballenas, sino que también plantean preguntas fascinantes sobre el desarrollo y la evolución del lenguaje entre diversas especies en nuestro planeta.