El Ministro de Defensa de Canadá, Bill Blair, anunció que las agencias de seguridad nacional del país investigarán informes de que la tecnología anti-drones de última generación de una empresa con sede en Columbia Británica fue adquirida por una universidad rusa, lo que podría constituir una violación de las sanciones impuestas a Moscú por su guerra en Ucrania. Skycope Technologies niega haber violado las sanciones al vender tecnología a la universidad rusa.

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Las agencias de seguridad nacional de Canadá investigarán informes de que la tecnología anti-drones de última generación de una empresa con sede en Columbia Británica fue adquirida por una universidad rusa, lo que podría constituir una violación de las sanciones impuestas a Moscú por su guerra en Ucrania, según el Ministro de Defensa de Canadá, Bill Blair.

El Ministro de Defensa hizo este anuncio durante la inauguración del Halifax International Security Forum.

Varios medios ucranianos y rusos han informado de que el detector de radar SkyEye de Skycope Technologies Inc., con sede en Vancouver, ha sido adquirido por la Universidad Tecnológica de Mirea de Rusia, con sede en Moscú. En respuesta a los informes de los medios, la empresa ha negado vehementemente la sugerencia de que haya violado el embargo.

Según la empresa, es la primera vez que se enteran de que su dispositivo está siendo utilizado por la universidad rusa.

Blair afirmó que ha visto informes sobre el asunto en las redes sociales, que describió como inexactos.

Sin embargo, los informes han llamado la atención de las autoridades canadienses.

El Ministro de Defensa dijo que Canadá se toma muy en serio los informes de violación de sanciones y que las agencias de aplicación de la ley y de inteligencia de seguridad nacional investigarán el asunto.

Si se ha producido una violación de las sanciones impuestas, se podrán seguir los procesos legales correspondientes.

Blair añadió que no quiere adelantarse a la investigación ni a ninguna acción legal posterior que pueda tener lugar, pero aseguró que se trata de un asunto que se toma muy en serio.

El sistema anti-drones tiene la capacidad de detectar y reconocer más de 330 tipos diferentes de drones, incluso a distancias de hasta 33 kilómetros, y puede cubrir un área de 194 kilómetros cuadrados.

Según informes de Europa del Este, la universidad tecnológica rusa también adquirió tres drones-gun fabricados en China para integrarlos con el detector fabricado en Canadá.


En su declaración, Skycope Technologies Inc.

afirmó que no puede controlar la circulación de sus productos ni evitar que sean falsificados.

La empresa declaró que no presta servicios a países y regiones prohibidos por Canadá y que tampoco tiene distribuidores en países que están bajo embargo.

Según informes de los medios de Europa del Este, el empresario ruso Maxim Susloparov facilitó el acuerdo para adquirir la tecnología a través de la Unión Económica Euroasiática y la empresa con sede en Moscú Techcom.

La universidad lanzó una licitación para la compra del sistema a principios de mayo y fue entregado durante la primera semana de junio, según informes de la prensa ucraniana.

Aunque ninguna de las empresas o personas citadas en los informes de Europa del Este aparece en la lista de sanciones de Canadá, parece ser que la tecnología está bajo estricto control.

Sin embargo, varios informes internacionales han señalado el éxito de Moscú para eludir las sanciones de alta tecnología utilizando países terceros y intermediarios para negociar acuerdos para obtener tecnología occidental restringida.

Recientemente, funcionarios de justicia de Estados Unidos acusaron a dos ciudadanos ruso-canadienses de Montreal y a un hombre de Brooklyn de conspirar para evadir sanciones mediante la compra de productos electrónicos a empresas de Estados Unidos y enviarlos al extranjero.

Los registros judiciales de Estados Unidos acusan a los acusados de contrabando, conspiración para violar sanciones y conspiración de fraude telegráfico.

Según los registros, uno de los acusados compró componentes electrónicos estadounidenses para el ejército ruso mientras vivía en Canadá durante varios años.