La festividad de San Isidro en Santander reunió a más de 120 hortelanos en una celebración que destacó la importancia de los huertos urbanos para la comunidad y la educación ambiental. El Ayuntamiento anuncia futuras ampliaciones y actividades que fortalecerán su carácter social y educativo.
La festividad de San Isidro en Santander ha sido una ocasión especial para que los vecinos que participan en los huertos urbanos municipales celebraran su labor y su contribución a la comunidad.
La alcaldesa Gema Igual, acompañada por la concejala de Participación Ciudadana, Lorena Gutiérrez, compartió un momento de convivencia con aproximadamente 120 hortelanos en la Finca Altamira, uno de los espacios destinados por el Ayuntamiento para estos proyectos.
La celebración, que tuvo lugar en un ambiente festivo, incluyó una paellada popular, música en vivo y la actuación del coro ‘La Alegría de la Huerta’, que animó la jornada y fomentó la interacción entre los asistentes.
Igual expresó su satisfacción por el compromiso de los hortelanos, resaltando que estos espacios no solo promueven la agricultura urbana, sino que también fortalecen la dimensión social, educativa y comunitaria de la ciudad.
Desde hace varios años, Santander ha apostado por impulsar y ampliar su red de huertos urbanos, que actualmente cuenta con más de un centenar de espacios distribuidos en zonas como Duque de Ahumada, Concepción Arenal, Altamira y El Alisal.
Estos huertos son gestionados en su mayoría por personas mayores de 65 años, quienes no solo disfrutan de una actividad saludable, sino que también encuentran una vía para mantener el contacto social, compartir conocimientos y colaborar en proyectos comunes.
La iniciativa, además, ha sido muy valorada por la ciudadanía, que la considera una forma efectiva de promover la sostenibilidad, la alimentación saludable y la participación vecinal.
La alcaldesa ha asegurado que el Ayuntamiento continuará promoviendo la creación de nuevos huertos y desarrollando actividades que refuercen su carácter social y pedagógico.
Es importante destacar que, en el contexto europeo, la tendencia hacia la agricultura urbana ha ido en aumento en los últimos años. Ciudades como Barcelona, Madrid y París también han implementado programas similares, reconociendo los beneficios para la salud, el medio ambiente y la cohesión social.
En cifras, la inversión en estos proyectos en Santander ha sido de aproximadamente 50.000 euros, lo que equivale a unos 45.000 euros en moneda europea, para la adquisición de terrenos, materiales y actividades de formación. La alcaldesa ha recordado que la historia de los huertos urbanos en España se remonta a principios del siglo XX, cuando las comunidades rurales comenzaron a promover la agricultura como medio de subsistencia.
Sin embargo, en las últimas décadas, su papel en las zonas urbanas ha cobrado una nueva dimensión, siendo una respuesta a los desafíos de la sostenibilidad y el bienestar social.
En definitiva, la celebración de San Isidro en Santander ha reafirmado el compromiso del Ayuntamiento con el impulso de prácticas agrícolas sostenibles y participativas, y ha anunciado la intención de seguir ampliando y enriqueciendo estos espacios que, además de producir alimentos, sirven para fortalecer el tejido social y promover la educación ambiental en la ciudad.
