Preparar el auto adecuadamente puede marcar la diferencia entre un viaje placentero y uno lleno de inconvenientes. Aquí te dejamos recomendaciones para garantizar un viaje seguro y cómodo.

Con la llegada de las Fiestas y las vacaciones, muchos argentinos se preparan para salir a la ruta con sus vehículos, deseosos de disfrutar de días de descanso en diferentes lugares del país.

Sin embargo, antes de emprender el viaje, es fundamental asegurarse de que el auto esté completamente listo para la aventura.

Aunque es habitual revisar el vehículo en los días previos a los viajes, esto no siempre es suficiente.

Existen aspectos esenciales a tener en cuenta que pueden ser determinantes al recorrer largos kilómetros.

Una recomendación clave es no dejar los chequeos mecánicos para el último momento.

Durante las épocas de vacaciones, los talleres suelen experimentar una alta demanda, lo que puede complicar la obtención de citas para revisiones necesarias.

Por ello, es conveniente realizar un mantenimiento anticipado del vehículo para evitar sorpresas desagradables.

En primer lugar, es importante verificar la documentación y los accesorios del auto.

Según la Ley de Tránsito 24.449, tanto la Verificación Técnica Vehicular (VTV) como el seguro vigente son requisitos obligatorios para circular.

No debemos olvidar la licencia de conducir vigente, la cédula verde, el DNI, y otros elementos como un matafuego que esté en condiciones y balizas de señalización.

Una revisión mecánica minuciosa es esencial antes de un viaje largo.

La condición de los frenos es un aspecto primordial.

Es recomendable comprobar el sistema de frenos, y, si es necesario, cambiar las pastillas, especialmente si la ruta incluye terrenos montañosos.

Un buen consejo es utilizar el motor para frenar en descensos, lo que ayuda a evitar el recalentamiento de los discos de freno.

La refrigeración del motor también es un punto a considerar, puesto que el recalentamiento es un problema frecuente en viajes a zonas altas.

Se debe prestar especial atención al sistema de refrigeración y al aire acondicionado, asegurándose de que ambos funcionen correctamente para evitar incomodidades durante el trayecto.

Además, es obligatorio circular con las luces bajas encendidas en todo momento, y es recomendable llevar bombillas de repuesto en la guantera para resolver cualquier eventualidad.

Otra recomendación es no usar las luces antiniebla a menos que sea estrictamente necesario.

También es crucial revisar los neumáticos.

Deben estar en perfecto estado, acorde al tipo de terreno por donde se transitará. La presión de los neumáticos debe ajustarse a las especificaciones del fabricante y no olvidarse de revisar la rueda de repuesto, que debe estar inflada para cualquier imprevisto.

Para quienes planean un viaje largo, lo ideal es estructurar la jornada, estableciendo paradas cada tres horas para descansar, y evitar conducir de noche para mantener la atención y visibilidad.

Por supuesto, el uso de cinturones de seguridad es obligatorio, al igual que el respeto por el número de pasajeros permitido en el vehículo.

Si viajamos con mascotas, es esencial sujetarlas con un arnés adecuado.

Además, es aconsejable no dejar objetos sueltos en el interior del vehículo, ya que en caso de frenadas bruscas podrían convertirse en proyectiles peligrosos.

Al cargar el vehículo, es fundamental no exceder el peso máximo permitido y distribuir los bultos de manera adecuada, colocando los objetos más pesados en el fondo del baúl.

De esta forma, se asegura un mejor comportamiento del auto y se evita comprometer su estabilidad.

Por último, todas estas recomendaciones no solo ayudan a prevenir fallos mecánicos, sino que también garantizan una mayor seguridad para todos los ocupantes del vehículo, permitiendo disfrutar de unas vacaciones placenteras y sin contratiempos.