Con el incremento de dispositivos electrónicos de control de tránsito, surgen nuevas modalidades de estafas relacionadas con multas. Se recomienda verificar la autenticidad de cualquier notificación recibida.

En la actualidad, el crecimiento de los dispositivos tecnológicos utilizados para el control de tráfico ha generado un aumento en la emisión de multas de tránsito, muchas de las cuales son enviadas por correo o mediante mensajes electrónicos.

En este contexto, se ha vuelto crucial para los conductores y propietarios de vehículos asegurarse de la veracidad de las notificaciones de infracción que reciben.

Tradicionalmente, las multas se entregaban en el momento de la sanción por parte de un agente de tránsito.

Sin embargo, esta práctica se ha vuelto menos común, dejando a muchos usuarios expuestos a recibir notificaciones de multas sin haber sido siquiera conscientes de la infracción.

Se ha reportado un aumento en las estafas virtuales donde los usuarios son engañados a pagar multas que realmente no les corresponden.

A menudo, estas notificaciones incluyen enlaces, correos electrónicos y documentos que parecen auténticos pero que pueden ser falsos.

Para evitar caer en estas estafas, es esencial que los afectados verifiquen la autenticidad de las multas recibidas.

La forma más segura de hacerlo es accediendo al sitio web oficial de la jurisdicción desde la que se emitiría la multa.

En este portal, los usuarios pueden buscar actas utilizando su número de documento o el dominio del vehículo

Si efectivamente existe un registro de la infracción, entonces será posible proceder a descargar o escanear el código QR de manera confiable.

Sin embargo, si la multa resulta ser falsa, es importante no realizar ningún pago y, en su lugar, contactar al Juzgado de Faltas correspondiente para aclarar la situación.

Una vez que se confirme la veracidad de la infracción, los conductores tienen dos opciones: pagar la multa, que en algunas jurisdicciones puede llevar aparejados descuentos significativos, o impugnarla si consideran que no hay fundamento para ella o si la infracción no se cometió. Es importante tener en cuenta que, si se decide impugnarla, generalmente no se podrá acceder a los descuentos por pago voluntario, ya que estos son ofrecidos bajo la premisa de que el infractor no ha cuestionado la validez de la multa.

Dificultades adicionales pueden presentarse si las infracciones están asociadas a vehículos que han sido vendidos.

En tales casos, el propietario debe enviar un aviso al Juzgado de Faltas sobre la transferencia de la propiedad.

Recientemente, han circulado imágenes en redes sociales de multas fraudulentas que incluyen códigos QR. Este fenómeno resalta la necesidad de una debida diligencia antes de realizar cualquier acción respecto a notificaciones de multas.

En suma, es imperativo verificar la existencia de una infracción utilizando los portales virtuales del organismo competente o comunicándose directamente con el juzgado correspondiente.

Por último, deben considerarse las circunstancias específicas de cada caso, ya que esta nota pretende ofrecer lineamientos generales y no un asesoramiento legal individualizado.