A mediados de este año, Honda realizó el lanzamiento de la nueva generación de su icónico modelo CR-V en Argentina, aunque la presentación dejó a muchos entusiastas del automóvil con ganas de más.

Esto no es indicativo de que el nuevo modelo no sea una mejora notable; de hecho, se aprecian avances significativos.

Sin embargo, los verdaderos encantos de este SUV se reservaron para la versión de gama alta: el CR-V Advance Hybrid.

El CR-V Advance Hybrid no solo se define como la variante más completa dentro de la gama, sino que también introduce un innovador sistema de propulsión híbrido, resaltando su carácter con la capacidad de tracción en las cuatro ruedas.

Esta característica se convertirá en una norma, ya que se planea el lanzamiento de otra versión AWD con motor de combustión interna en un futuro cercano.

Este nuevo lanzamiento, junto con la reciente incorporación de la última generación del Civic, marca el inicio de la incursión de Honda en el sector de la electromovilidad en el mercado argentino.

Esta estrategia se complementará con el lanzamiento del Accord, que también contará con una opción híbrida.

El modelo híbrido de CR-V destaca por ofrecer un confort de marcha superior, con un andar sólido y un excelente aislamiento interior.

Su llegada no solo representa una mejora técnica, sino que también simboliza un regreso de Honda a una oferta más robusta de automóviles después de ciertos años de ausencia.

El CR-V ha sido un pilar en la construcción de la imagen “semi premium” de Honda en Argentina, convirtiéndose en el modelo más deseado para muchas familias del país durante años.

Visualmente, la versión Advance Hybrid se distingue del resto de la gama por varias características estéticas, tales como las barras de techo que, aunque discretas, aportan un toque distintivo.

Las llantas de 19 pulgadas oscurecidas, en contraste con las de aluminio de 18” de otras versiones, también marcan una diferencia notable.

En la parte delantera, la parrilla presenta modificaciones en su diseño, así como un fondo más oscuro en las luces.

Además, los emblemas “AWD” y “Hev” refuerzan la distinción de esta versión híbrida.

El interior del CR-V mantiene un diseño austero pero sofisticado, con nuevas combinaciones de texturas que le aportan un toque de elegancia.

Sin embargo, el tablero de instrumentos digital con limitadas opciones de personalización y la pantalla central de multimedia, que puede parecer pequeña para algunos, son aspectos que podrían mejorarse.

Entre las adiciones útiles se encuentra el Head Up Display, que proyecta información relevante en el parabrisas.

El espacio en las plazas traseras es generoso, con la ventaja de poder reclinar los respaldos, lo que se ve complementado por una apertura de puertas de casi 90° que mejora el acceso.

Uno de los puntos de crítica para esta versión es la ausencia de una rueda de auxilio; el sistema híbrido requiere que el tanque de combustible se posicione de tal manera que ocupa el espacio destinado a una llanta de repuesto.

El verdadero atractivo de esta versión, sin embargo, reside en su sistema de propulsión.

Utiliza un motor eléctrico de 184,5 caballos de fuerza que permite que, en la mayoría de las circunstancias, este sea el encargado de impulsar el vehículo.

El motor de gasolina de 2.0 litros, aunque capaz de mover el vehículo, se centra principalmente en generar energía.

Esta combinación es eficiente y asegura que rara vez ambos motores operen al mismo tiempo, excepto en momentos de alta demanda.

El CR-V Advance Hybrid está equipado con una moderna transmisión automática CVT que evita el efecto de ciclomotor que caracteriza a este tipo de sistemas, logrando una experiencia de conducción fluida incluso durante aceleraciones fuertes.

Su sistema de tracción integral funciona de manera automática y mecánica, proporcionando fuerza a ambos ejes según sea necesario.

Aunque su diseño no está orientado a un uso extremo fuera del asfalto, ofrece un andar confortable, con un consumo promedio de 6,5 L/100 km, que representa casi la mitad del consumo de un modelo de gasolina equivalente.

En términos de especificaciones, el nuevo Honda CR-V Advance Hybrid tiene una longitud de 4.706 mm, un ancho de 1.866 mm y una altura de 1.684 mm, con un peso de 1.824 kg y una capacidad de maletero de 581 dm3. Su motor de gasolina de 2.0 litros ofrece una potencia de 148 CV, complementado por su motor eléctrico que entrega 184,5 CV de potencia.

La velocidad máxima del vehículo alcanza 187 km/h, lo que lo convierte en una opción confiable y eficiente para familias modernas.