Audi lanzó en Europa su renovado modelo A5, una versión que combina dimensiones mayores, estética deportiva y avanzadas funciones digitales, con precios que rondan los 63.000 y 83.000 euros según versiones. La actualización responde a las tendencias del mercado y a la reorganización interna de la marca alemana.

Esta renovación llega en medio de un cambio de estrategia global de la marca alemana, que ha reorganizado su nomenclatura para diferenciar claramente entre modelos eléctricos e de combustión.
El #Audi A5, que en su versión anterior era conocido por su silueta clásica de sedán y coupé de cinco puertas, ahora adopta un aspecto más deportivo, con una figura más pegada al suelo, mayor tamaño y una estética que sigue la tendencia global de eliminar gradualmente los sedanes en favor de vehículos de cinco puertas y deportivos, como los coupés y los SUVs.
El nuevo #A5 se fabrica sobre una plataforma denominada PPC (Premium Plattform Combustion), desarrollada específicamente para modelos de combustión de altas prestaciones.
En cuanto a dimensiones, aumenta en 7 centímetros en longitud, alcanzando los 4,83 metros, y también crece en ancho y alto, con 1,86 metros y 1,44 metros respectivamente.
La distancia entre ejes se amplía a 2,89 metros, mejorando la estabilidad y el confort en la conducción.
El modelo llega a mercados selectos, incluido Argentina, en dos versiones principales: Advanced, con un precio aproximado de 60.000 euros, y S-Line quattro, que alcanza los 80.000 euros. Ambas versiones mantienen un motor turbo de 2.0 litros, pero con potencias superiores: 204 caballos en la primera y 272 caballos en la segunda. La transmisión sigue siendo automática de doble embrague S-tronic de siete velocidades, brindando una conducción eficiente y rápida.
En el interior, el A5 presenta un salto en calidad y tecnología, con un entorno digital de alta gama. La cabina incluye hasta tres pantallas, con una de 14,5 pulgadas orientada al conductor, un tablero digital de 11,9 pulgadas y una tercera pantalla que en la versión S-Line permite gestionar funciones de navegación, entretenimiento y conectividad de forma independiente.
La iluminación ambiental LED ofrece hasta 30 opciones de color, y el techo panorámico con control de transparencia aporta luminosidad y modernidad.
Respecto a la ergonomía, las dimensiones exteriores no se traducen en un mayor espacio en las plazas traseras, que sigue siendo algo recortado, pero el volumen de carga del baúl alcanza los 445 litros, con la posibilidad de incrementar hasta 1.299 litros rebatiendo los asientos traseros.
En términos de diseño, se destacan la parrilla más ancha y baja, faros LED de diseño afilado y tomas de aire tridimensionales, que aportan un estilo más deportivo y agresivo.
Los detalles tecnológicos incluyen sensores de estacionamiento, cámaras 360°, asistencias a la conducción como frenado autónomo, control de velocidad adaptativo y mantenimiento de carril.
El comportamiento dinámico del A5 favorece tanto entornos urbanos como carreteras
El comportamiento dinámico del A5 favorece tanto entornos urbanos como carreteras. La versión con tracción integral y suspensión deportiva permite manejar con estabilidad en curvas y cambios de apoyo rápidos. La opción de modos de conducción, como Confort, Efficiency y Dynamic, permite adaptar el carácter del vehículo según las preferencias del conductor, siendo este último el modo más deportivo.
Históricamente, Audi ha sido líder en tecnología automotriz, especialmente en el segmento premium, desde la introducción de su primer modelo en los años 80.
La marca alemana se ha destacado por su #innovación en la integración de sistemas digitales y asistentes a la conducción, consolidando su presencia global con una red de concesionarios que se extiende por todos los continentes.
El lanzamiento del nuevo A5 refleja la estrategia de Audi de responder a las tendencias del mercado, donde los vehículos deportivos y tecnológicos cada vez ganan más terreno frente a los tradicionales sedanes.
Su llegada a mercados como Argentina generará interés entre los consumidores que buscan un vehículo con buen rendimiento, tecnología avanzada y estética moderna, con precios que en euros oscilan entre 60.000 y 80.000 euros dependiendo de la versión y opción de equipamiento.