La Comunidad de Madrid ha mejorado la atención médica para casi 100.000 empleados públicos mediante un acuerdo con FREMAP, unificando servicios y elevando la calidad de las prestaciones en salud laboral.

La Comunidad de Madrid ha dado un paso importante en la protección de la salud de su personal público al establecer un nuevo convenio con la mutua FREMAP, que entró en vigor a principios de este año.
Este acuerdo ha permitido ofrecer una atención sanitaria integral y de alta calidad a cerca de 100.000 empleados públicos de la región, quienes ahora reciben una cobertura más completa y eficiente en caso de accidente o enfermedad profesional.
Hasta la fecha, la atención sanitaria para estos empleados estaba fragmentada, ya que diferentes proveedores gestionaban distintos aspectos de la salud laboral, lo que generaba dispersión y, en ocasiones, demoras en la prestación de servicios.
La firma del convenio con FREMAP ha consolidado estos recursos, creando un sistema unificado que garantiza una atención especializada y rápida en todas las circunstancias.
El acuerdo, que ha sido presentado por la consejera de Economía, Hacienda y Empleo, Rocío Albert, durante su visita al hospital de la mutua en Majadahonda, representa un avance significativo en la colaboración público-privada en materia de salud laboral en la Comunidad de Madrid.
Albert destacó que esta iniciativa es un ejemplo del compromiso del gobierno regional por promover la protección y el bienestar de su plantilla administrativa.
Este nuevo sistema de atención sanitaria comprende 24 instalaciones distribuidas por toda la región, entre ellas dos centros que operan las 24 horas del día, los 365 días del año.
Uno de estos centros, que visitó la consejera, cuenta con múltiples especialidades médicas, áreas hospitalarias y quirúrgicas, además de unidades de terapia ocupacional y de readaptación profesional.
Estas instalaciones están diseñadas para atender cualquier contingencia relacionada con la salud de los empleados públicos.
La atención no solo incluye consultas médicas tradicionales, sino también servicios especializados como rehabilitación, pruebas diagnósticas y citas con diferentes especialistas.
Además, se ha puesto un fuerte énfasis en la formación y readaptación profesional de aquellos empleados que, debido a su condición de salud, no puedan retornar inmediatamente a su puesto de trabajo.
Para ello, la mutua ofrece programas de formación en áreas innovadoras como manejo de drones, impresión en 3D y metrología.
Desde una perspectiva histórica, la gestión de la salud laboral en el sector público en Madrid ha evolucionado considerablemente en las últimas décadas.
En los años 80, la atención en este ámbito era mucho más limitada y dispersa, con recursos fragmentados que dificultaban una atención efectiva. La unificación de servicios mediante convenios como el actual refleja el compromiso de la administración regional con la salud y el bienestar de sus empleados, adaptándose a los avances tecnológicos y las necesidades actuales.
En términos económicos, la inversión en salud laboral es significativa, pero se considera fundamental para reducir el ausentismo, mejorar la productividad y garantizar un entorno de trabajo seguro y saludable.
La colaboración con empresas especializadas como FREMAP permite optimizar estos recursos, asegurando que la atención sea de primer nivel y responda a los estándares más exigentes.
En conclusión, la Comunidad de Madrid continúa fortaleciendo su sistema de salud laboral, brindando una atención integral y moderna a sus empleados públicos, con la finalidad de proteger su bienestar y promover un entorno laboral saludable, eficiente y preparado para los retos del siglo XXI.