En la Comunidad de Madrid, el Servicio de Urgencias Médicas (SUMMA 112) ha activado el Código Ictus en 1.906 ocasiones durante este año, lo que representa un incremento del 6,7% en comparación con 2023, cuando se registraron 1.780 activaciones.

Este protocolo sanitario es fundamental en la respuesta a emergencias relacionadas con accidentes cerebrovasculares y forma parte de los cinco códigos asistenciales que gestiona la sanidad pública regional, junto con los de infarto, trauma grave, sepsis y donaciones de órganos a corazón parado.

El eficiente funcionamiento de este protocolo se lleva a cabo gracias a la colaboración del SUMMA 112, la Atención Primaria (AP) y los trece hospitales públicos de la región que están equipados con unidades especializadas en el tratamiento de ictus.

En 2023, estos hospitales atendieron a 10.253 pacientes por esta causa.

Los hospitales incluyen entidades como el 12 de Octubre, Clínico San Carlos, Fundación Jiménez Díaz, Gregorio Marañón, La Paz, La Princesa y Ramón y Cajal en la capital; y otros como Fundación Alcorcón, Getafe, Príncipe de Asturias en Alcalá de Henares, Puerta de Hierro Majadahonda, Rey Juan Carlos en Móstoles y Torrejón, todos con atención disponible las 24 horas del día.

Este procedimiento consiste en que los profesionales de SUMMA 112 realizan una evaluación del paciente en el lugar de los hechos, seguido del traslado utilizando ambulancias equipadas.

La coordinación es clave, ya que el Centro Coordinador de Urgencias y Emergencias se encarga de recopilar información de los sanitarios en el terreno y notificar al hospital sobre la llegada del paciente y su estado clínico.

Este protocolo asegura que el paciente comience a recibir atención inmediata al llegar al hospital, siendo atendido por los equipos de Urgencias y Neurología.

Con motivo del Día Mundial del Ictus, que se conmemora cada 29 de octubre, el SUMMA 112 subraya la importancia de la atención rápida, ya que el ictus es una de las enfermedades más prevalentes en el grupo de patologías que requieren atención urgente.

El servicio resalta que cada minuto es crucial y anima a la población a llamar inmediatamente al 112 si se presentan síntomas como dificultad para hablar o entender, una sonrisa caída hacia un lado o pérdida de fuerza en un brazo o pierna.

No se debe esperar a que los síntomas mejoren ni trasladarse al hospital por cuenta propia.

El Plan de Atención a Pacientes de Ictus de la Comunidad de Madrid también se extiende a unidades de rehabilitación y centros de neurorrehabilitación, asegurando un seguimiento exhaustivo tras el alta médica, centrado en los centros de salud.

Los tipos de ictus se clasifican principalmente en dos categorías, el isquémico, que ocurre por la obstrucción de un vaso sanguíneo en el cerebro, y el hemorrágico, que se presenta por la ruptura de un vaso.

En ambos casos, la rápida atención médica es decisiva para reducir la mortalidad y minimizar secuelas.

Se estima que una de cada seis personas sufrirá un ictus en su vida, siendo fundamental adoptar hábitos de vida saludables para prevenirlo, como mantener una dieta equilibrada, evitar el consumo de tabaco y grasas saturadas, y promover la actividad física regular.