El Gobierno regional formaliza la protección del hilado tradicional del esparto, una práctica ancestral de la Comunidad de Madrid que forma parte del legado cultural y económico de localidades como Villarejo de Salvanés y Colmenar de Oreja.
Este reconocimiento busca proteger y divulgar una técnica que ha sido transmitida de generación en generación en la región, especialmente en localidades como Villarejo de Salvanés y Colmenar de Oreja.
La actividad consiste en el hilado y manipulación del esparto, una planta silvestre que crece en los campos madrileños y que ha sido fundamental en la economía y la cultura de estas comunidades.
Durante décadas del siglo XX, esta labor constituyó uno de los principales medios de subsistencia para muchas familias, quienes elaboraban desde cestas y alfombrillas hasta otros objetos de uso cotidiano.
La técnica en sí requiere habilidades manuales precisas y un profundo conocimiento de la materia prima, y tradicionalmente ha sido una labor realizada en su mayoría por mujeres.
Históricamente, el esparto ha estado presente en la vida de los habitantes de la región, formando parte de su identidad cultural. La toponimia local, expresiones en la jerga profesional y canciones populares reflejan la importancia social y económica de esta actividad. Sin embargo, en las últimas décadas, la producción de esparto ha disminuido considerablemente debido a la industrialización y a la competencia de materiales sintéticos, lo que ha llevado a que su práctica quede en un riesgo de desaparición.
Desde la recolección del esparto hasta el hilado manual
El reconocimiento como Bien de Interés Cultural busca, además de proteger la técnica, promover su difusión y recuperación. En esta línea, diferentes comunidades y asociaciones colaboran con instituciones locales para realizar actividades como demostraciones en ferias tradicionales, recreaciones históricas y exposiciones que muestran el proceso artesanal, desde la recolección del esparto hasta el hilado manual.
Estas acciones no solo preservan la técnica, sino que también fomentan el turismo cultural y fortalecen el sentido de identidad de los vecinos. Para financiar estas iniciativas, se destinan recursos equivalentes a unos 15.000 euros, destinados a publicaciones, talleres y eventos que ponen en valor la artesanía.
Es importante destacar que el patrimonio inmaterial, como el hilado de esparto, representa un legado vivo que refleja la historia social y económica de estas comunidades.
La #tradición del hilado en esparto en la región madrileña tiene raíces que se remontan a siglos atrás, cuando la economía local dependía en gran medida de la agricultura y las actividades artesanales.
No te pierdas el siguiente vídeo de habitar el esparto. desarrollo social a través del patrimonio ...
