La Iglesia de San Salvador en Leganés ha sido declarada Bien de Interés Cultural por la Comunidad de Madrid, destacando su relevancia arquitectónica y su historia.
La Comunidad de Madrid ha tomado una decisión significativa en su última reunión de gobierno, al declarar la Iglesia parroquial de San Salvador, ubicada en Leganés, como Bien de Interés Cultural (BIC) en la categoría de Monumento.
Esta iglesia es un notable ejemplo de la arquitectura de la región, representando las características del estilo tardogótico y el clasicismo ornamental que marcaron la evolución arquitectónica de los siglos XVI y XVII.
La iglesia, que se encuentra en un excelente estado de conservación gracias a una reciente intervención completa, se erige como un testimonio arquitectónico valioso en el paisaje cultural de la Comunidad de Madrid.
La edificación original se inició entre finales del siglo XV y principios del siglo XVI, y su construcción se extendió hasta la finalización de los elaborados retablos diseñados por el famoso arquitecto José de Churriguera en 1720. La cabecera de esta parroquia comenzó a construirse en el segundo cuarto del siglo XVI sobre los restos de una pequeña iglesia de estilo mudéjar, siguiendo el modelo del gótico tardío que fue predominante en esa época.
Sin embargo, el desarrollo de la nave de transepto y el cuerpo de la iglesia, que se emprendió alrededor de 1660, marca una transición hacia una arquitectura más acorde con el manierismo clasicista.
Este estilo tiene sus raíces en la obra de maestros reconocidos como Juan de Herrera, quien dejó una profunda huella en la arquitectura española con sus innovaciones estructurales y ornamentales.
La Iglesia de San Salvador no solo destaca por su arquitectura, sino también por su interior, donde se pueden encontrar un impresionante conjunto de doce retablos, datados entre los siglos XVII y XVIII. Estos retablos no solo constituyen un elemento decorativo significativo, sino que también reflejan la rica tradición litúrgica y artística de la época.
Además de su valor arquitectónico y artístico, la iglesia alberga un importante archivo parroquial y municipal.
Este archivo es crucial para entender la evolución de la construcción del templo y los diferentes maestros toledanos y madrileños que trabajaron en sus diversas fases a lo largo de casi dos siglos.
Documentos históricos y registros en este archivo permiten a los investigadores y a los interesados conocer más sobre la historia de la iglesia y su comunidad.
La designación como Bien de Interés Cultural subraya la importancia de la preservación de este tipo de monumentos, no solo como emblemas de la historia y cultura local, sino también como parte inherente del patrimonio histórico de España.
La Iglesia de San Salvador ahora se suma a la lista de numerosas construcciones históricas que son protegidas y apreciadas en toda la Comunidad de Madrid, asegurando su valor y legado para las generaciones futuras.