La Comunidad de Madrid ha destinado más de 5 millones de euros este año para la adquisición de 44 nuevos vehículos destinados a la modernización y ampliación de la flota del Cuerpo de Bomberos.

Esta iniciativa fue supervisada por Carlos Novillo, consejero de Medio Ambiente, Agricultura e Interior, quien visitó el Parque Central de Las Rozas para conocer de primera mano estas nuevas incorporaciones que se distribuirán por los 21 parques de bomberos que existen en la región.

Entre los vehículos adquiridos, destaca que más de la mitad, es decir, 24 de ellos, son totalmente eléctricos, lo que significa que generan cero emisiones.

Estos vehículos eléctricos, conocidos como buses, son esenciales para la movilización del personal de bomberos, facilitando el traslado entre diferentes parques, realizando relevos en intervenciones en curso y participando en actos divulgativos.

La Agencia de Seguridad y Emergencias de Madrid 112 (ASEM 112) se encargará de distribuir estos vehículos en todas sus instalaciones, incluido el Centro de Coordinación Operativa (CECOP).

Además de los autobuses eléctricos, el gobierno regional ha adquirido cuatro autobombas rurales pesadas, seis unidades de mando y jefatura, ocho vehículos de asistencia técnica y dos autoescaleras automáticas.

Éstas últimas son especialmente importantes para las labores de extinción, rescate y salvamento, ya que cuentan con un alcance de hasta 32 metros de altura.

Cabe mencionar que en enero de este año, el consejero Novillo ya había entregado seis autoescaleras más, por lo que, tras esta última adquisición, el Cuerpo de Bomberos de la Comunidad de Madrid contará con un total de 497 vehículos operativos.

La modernización de la flota tiene como objetivo reducir la antigüedad de los vehículos y mejorar la eficacia y calidad en la respuesta ante emergencias.

Además, la incorporación de tecnología de vanguardia no solo incrementará la seguridad durante las operaciones, sino que también permitirá disminuir los costos de mantenimiento de la flota existente.

Este esfuerzo por parte del Ejecutivo autonómico refleja un compromiso continuo con la seguridad de los ciudadanos de Madrid, así como con la mejora de los servicios de emergencia.

La historia del Cuerpo de Bomberos de la Comunidad de Madrid se remonta a hace más de 150 años, siendo un pilar fundamental en la protección y seguridad de la población.

A lo largo de los años, han tenido lugar significativos avances en equipamiento y formación, adaptándose a los retos que imponen las nuevas formas de urbanismo y los riesgos asociados a los desastres naturales.

A medida que la población sigue creciendo y las infraestructuras se vuelven más complejas, acciones como esta son esenciales para garantizar una respuesta rápida y eficaz ante cualquier tipo de emergencia.