La Comunidad de Madrid ha decidido declarar como Bien de Interés Cultural la antigua fábrica de Clesa en el distrito de Fuencarral-El Pardo

La Comunidad de Madrid ha anunciado que declarará como Bien de Interés Cultural (BIC) en la categoría de monumento a la antigua fábrica de Clesa, un icónico y referente de la arquitectura industrial del siglo XX situado en el distrito de Fuencarral-El Pardo.

Esta distinción ha sido determinada tras valorar su importancia y singularidad histórica por parte de los técnicos de la Dirección General de Patrimonio del Gobierno autonómico.

El edificio, obra del reconocido arquitecto Alejandro de la Sota y el ingeniero Manuel Ramos, es considerado uno de los ejemplos más destacados de la arquitectura industrial española del siglo XX. Su declaración como BIC, en la categoría más relevante, será aprobada próximamente por el Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid, luego de recibir informes favorables tanto del Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid como del Ayuntamiento de la capital.

La fábrica de Clesa, que dejó de funcionar en 2011, ocupaba una extensión de más de 10.000 metros cuadrados en la avenida del Cardenal Herrera Oria.

Fue construida a finales de los años 50 para el embotellado de leche de esta empresa de origen burgalés, pero posteriormente amplió su oferta con la producción de diferentes postres lácteos.

Desde su inauguración en 1962, se convirtió en un referente en la zona norte de Madrid, especialmente en el distrito de Fuencarral-El Pardo, gracias a su calidad, tamaño y moderno diseño.

La antigua fábrica de Clesa representa no solo un hito en la arquitectura industrial, sino también un testimonio vivo de la historia económica y social de Madrid.

Con su declaración como BIC, se busca preservar y poner en valor este patrimonio cultural, asegurando su conservación y salvaguarda para las futuras generaciones.

Este reconocimiento fortalecerá la importancia de la arquitectura industrial española del siglo XX y su contribución al desarrollo de la región.

La Comunidad de Madrid seguirá trabajando en la protección y difusión del patrimonio cultural, fomentando su conocimiento y valoración.

La declaración de la antigua fábrica de Clesa como BIC es un paso importante en este camino, y se espera que contribuya al enriquecimiento cultural y turístico de la región.