La Comunidad de Madrid destina 6,8 millones de euros para ampliar la atención a mayores con nuevas plazas residenciales y de atención diurna. Este esfuerzo busca mejorar la calidad de vida de las personas dependientes en la región.
La Comunidad de Madrid ha tomado una significativa medida para mejorar la atención a las personas mayores y dependientes.
En un esfuerzo por apoyar a este colectivo, se han aprobado la creación de 375 nuevas plazas residenciales y de atención diurna, que estarán disponibles hasta junio de 2026. Esta decisión fue ratificada por el Consejo de Gobierno, que también ha asignado un total de 1,4 millones de euros para la creación de 44 plazas adicionales en dos residencias concertadas ubicadas en Torrejón de Ardoz y Rivas-Vaciamadrid.
La inversión global para este plan ascenderá a 6,8 millones de euros desde este mes y hasta la fecha límite mencionada, dedicándose a mejorar las condiciones de vida de los mayores que requieren atención.
Además, las plazas de atención diurna que se activaron el pasado 1 de noviembre en 28 centros de día de la región, también han recibido una inversión de 1,3 millones de euros.
Esto resulta en un compromiso claro de la Consejería de Familia, Juventud y Asuntos Sociales por la atención integral de los ancianos.
A partir del viernes, la iniciativa se ampliará con la incorporación de 160 plazas residenciales adicionales, que requerirán una inversión de 5,5 millones de euros en un total de 24 centros, incluyendo las 44 que ya han sido aprobadas.
Estos nuevos recursos están diseñados específicamente para atender a personas mayores dependientes que necesitan supervisión y apoyo constante para llevar a cabo las actividades cotidianas.
Los profesionales de estas residencias están capacitados para ofrecer un cuidado personalizado y asistencia especializada, ayudando a los mayores a mantener sus capacidades funcionales y buscando promover su autonomía y bienestar.
Para lograr esto, se cuenta con equipos multidisciplinares que incluyen médicos, psicólogos, terapeutas ocupacionales, enfermeros, fisioterapeutas y gerocultores, quienes trabajan conjuntamente para ofrecer el mejor servicio posible.
Es importante destacar que la red pública de atención social de la Comunidad de Madrid cuenta actualmente con más de 63.000 plazas, de las cuales más de 35.000 están destinadas a atender a personas mayores.
Este tipo de inversiones no solo responde a una necesidad creciente en la población, sino que también refleja un compromiso social hacia las personas más vulnerables de la sociedad.
La inclusión de nuevas plazas residenciales y diurnas es un paso importante hacia la mejora de la calidad de vida de los mayores en la región, y un esfuerzo que se enmarca dentro del Acuerdo Marco de atención residencial del Gobierno autonómico.
La importancia de atender a la población mayor de manera adecuada es crucial, ya que este grupo demográfico continúa creciendo en número y requiere de atención especializada y recursos apropiados.
Por lo tanto, estas iniciativas no solo fortalecerán el sistema de salud y bienestar social en Madrid, sino que también garantizarán un mejor futuro para nuestros ancianos.