El gobierno venezolano implementa medidas para facilitar el regreso de sus compatriotas afectados por restricciones aéreas y amenazas internacionales, en medio de tensiones con Estados Unidos.
Según informó la vicepresidenta ejecutiva, Delcy Rodríguez, a través de su cuenta oficial en Telegram, esta iniciativa busca también facilitar los procesos de salida para aquellos ciudadanos que deban viajar fuera del territorio venezolano en circunstancias urgentes.
Aunque no se brindaron detalles específicos sobre el alcance de este plan, se presume que incluye la coordinación con diferentes organismos internacionales y #aerolíneas para garantizar la repatriación segura.
Supuestamente, la medida surge en un contexto donde Estados Unidos ha emitido advertencias severas a aerolíneas, pilotos y traficantes de personas, advirtiendo que el espacio aéreo venezolano permanecerá cerrado en su totalidad.
Este mensaje fue publicado por Donald Trump en sus redes sociales, específicamente en la plataforma Truth, en la que afirmó que «les rogamos que consideren que el espacio aéreo sobre #Venezuela y sus alrededores permanecerá cerrado en su totalidad».
La declaración generó preocupación en el gobierno de Maduro, que denunció ante la comunidad internacional que estas declaraciones representan una amenaza explícita de uso de la fuerza, en claro incumplimiento de las normativas internacionales y de la Carta de las Naciones Unidas.
Supuestamente, estas acciones se producen en medio de una escalada de tensiones diplomáticas entre ambos países, que incluye acusaciones mutuas y amenazas veladas.
Se ha informado que la Administración Federal de Aviación (FAA) de Estados Unidos instó a las aerolíneas a extremar precauciones al sobrevolar Venezuela y el sur del Caribe
Además, se ha informado que la Administración Federal de Aviación (FAA) de Estados Unidos instó a las aerolíneas a extremar precauciones al sobrevolar Venezuela y el sur del Caribe, debido a una supuesta situación de riesgo en la zona.
Esto provocó la suspensión de vuelos de varias compañías, entre ellas Iberia, Air Europa y Turkish Airlines, que decidieron cancelar sus operaciones en el país.
Por su parte, el gobierno venezolano reaccionó con rapidez, otorgando un plazo de 48 horas para que las aerolíneas reanuden sus vuelos, de lo contrario, revocaría sus permisos de operación.
Hasta el momento, aerolíneas como Copa, Wingo, Boliviana de Aviación y Satena continúan operando en el país, junto con las compañías locales Avior y Conviasa, que mantienen activa su red aérea.
Desde una perspectiva histórica, esta no es la primera vez que Venezuela enfrenta conflictos en relación con su espacio aéreo. En los años 80 y 90, el país vivió varias crisis diplomáticas que afectaron sus rutas internacionales, en un contexto de tensiones políticas internas y externas.
La actual situación, sin embargo, parece marcar un punto de inflexión, con una escalada en las amenazas y un aumento en las medidas unilaterales que impactan directamente en la movilidad de sus ciudadanos.
Supuestamente, esta tensión también está vinculada a las recientes conversaciones entre líderes de ambos países, en las que, presuntamente, habría surgido interés en explorar posibles acercamientos.
