Un ataque de drones llevado a cabo por Ucrania ha provocado explosiones de gran magnitud en un importante arsenal militar situado en la región de Tver, en Rusia.

Según informes de diversos medios y relatos de blogueros de guerra, las explosiones fueron tan intensas que fueron registradas por sensores de terremotos.

Este incidente se produjo el miércoles y llevó a la evacuación de una localidad cercana debido a la gravedad de la situación.

Imágenes y videos distribuidos en redes sociales mostraron una espectacular bola de fuego que se elevó hacia el cielo nocturno, junto con una serie de detonaciones que resonaban alrededor de un lago ubicado aproximadamente a 380 kilómetros al oeste de Moscú. Testigos informaron que las explosiones fueron un suceso sin precedentes en el área, lo que ha desatado preocupación sobre la seguridad en torno a las instalaciones militares rusas.

La NASA detectó fuentes de calor intensas en un área de 14 kilómetros cuadrados en el sitio del ataque, un indicativo del alcance del daño que se produjo.

Las estaciones de monitoreo de terremotos también registraron lo que podría interpretarse como un pequeño sismo, lo que refleja la magnitud de las explosiones ocurridas durante el ataque.

Yuri Podolyaka, un bloguero militar pro-ruso y originario de Ucrania, comentó sobre la intensidad de este ataque: "El enemigo impactó un depósito de municiones en la zona de Toropets.

Todo lo que puede arder ya se está incendiando y explotando allí". Esta observación subraya no solo el éxito de la operación sino también el impacto significativo que puede tener en la capacidad de las fuerzas rusas para llevar a cabo operaciones militares.

El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, se pronunció sobre el acontecimiento en su habitual discurso nocturno, donde destacó la importancia del ataque sin mencionar el objetivo específico.

“Un resultado muy importante fue logrado la noche pasada en territorio ruso y tales acciones debilitan al enemigo”, expresó Zelensky.

“Agradezco a todos los involucrados.

Tal precisión es verdaderamente inspiradora”. Su agradecimiento se extendió a los servicios de seguridad y de inteligencia del país, que jugaron un papel crucial en la planificación y ejecución de la misión.

Un informante de la SBU, el servicio de seguridad del estado de Ucrania, indicó a Reuters que el ataque con drones había destruido un almacén donde se guardaban misiles, bombas guiadas y municiones de artillería, lo que debilitó de manera significativa los recursos bélicos rusos en la región.

Este episodio se suma a una serie de ataques y huelgas estratégicas que Ucrania ha llevado a cabo en el marco del conflicto, que ya dura más de un año.

Históricamente, la región de Tver ha tenido una larga relación con la industria militar de Rusia, lo que la convierte en un objetivo vital dentro de la estrategia del conflicto.

Los analistas observan que este tipo de operaciones podría cambiar el rumbo de la guerra, al limitar las capacidades rusas de reabastecimiento y operaciones de combate en el frente.

A medida que el conflicto avanza, la efectividad de tales ataques seguirá siendo un tema de atención tanto para expertos como para líderes de ambos países.